Rodrigo Pretto | [email protected]

Finalmente, y luego de 26 días de paro, empleados comunales de Cañada Rosquín levantaron la medida de fuerza. Este viernes hubo acuerdo entre el Sindicato y el Ejecutivo en la Audiencia de Conciliación que había convocado el Ministerio de Trabajo de la Provincia. “Todo terminó bien. Se hace la devolución de presentimos y días descontados que se habían quitado por el paro a los empleados. Y además, el agente que debía pasar a planta permanente lo hará", le dijo Luis Strumia, delegado gremial del Sindicato de los Trabajadores Municipales (SITRAM), a este medio. El lunes los trabajadores retomarán sus actividades de manera normal y el 20 de mayo continuarán las negociaciones en el gobierno local entre las partes.

En un encuentro que duró unas cuatro horas en la sede de la cartera laboral del gobierno santafesino, representantes del Sindicato de los Trabajadores Municipales (SITRAM), de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (FESTRAM) y de la Comuna de Cañada Rosquín encontraron un punto de acuerdo y lograron ponerle fin a una medida de fuerza que mantuvo en vilo a toda una comunidad a lo largo de casi un mes.


De acuerdo a Strumia, las negociaciones llegaron a buen puerto por la predisposición mostrada por el presidente de Comuna. "El dialogo fue en muy buenos términos. Mostró una gran voluntad para negociar. El agente que debía pasar a planta permanente lo va a hacer. Además, se hace la devolución de presentimos y días descontados que se habían quitado por el paro”, sostuvo.


Con el grueso de los puntos en discusión limados, la medida de fuerza quedó sin efecto y a partir del lunes los empleados comunales regresarán a sus puestos laborales. Sin embargo, los encuentros continuarán entre las partes. "Seguiremos negociando algunos detalles que quedaron pendientes. El 20 de mayo nos vamos a volver a reunir en la Comuna, donde estarán representantes de FESTRAM, de SITRAM y funcionarios del gobierno local", indicaron desde el ala gremial.



Así se desató la medida de fuerza


El pasado lunes 11 de abril, un paro de empleados comunales de Cañada Rosquín sorprendía a la localidad ubicada a la vera de la Ruta 34. Desde el sector gremial, reclamaban el pase a planta permanente de un agente, una promesa que Puntonet venía inclumpliendo desde 2019 tras comprometerse a través de dos actas. Además, sostenían que el Ejecutivo había llevado a cabo una serie de descuentos adicionales a los trabajadores y hasta acoso y persecución laboral.


Sin embargo, quien está al frente de la Comuna siempre aclaró que el único punto en discusión era el ingreso de un agente al gobierno local. Incluso siempre dejó en claro que aguardaba la liberación de un cupo dentro del Ejecutivo, situación próxima a cumplirse ya que un trabajador había recibido el ok con la tramitación de su jubilación.


La escalada del conflicto se fue acrecentando con el correr de las horas. La tensión llegó a tal punto, que desde el Sindicato montaron una carpa frente a la Comuna local donde empleados acamparon a lo largo de casi 10 días. Hasta hubo manifestaciones de vecinos frente a dicho espacio para reclamarle a los manifestantes que regresen a sus puestos laborales. Los servicios públicos estuvieron paralizados durante el paro y la falta de recolección de residuos fue uno de las prestaciones que más se sintió en la localidad.