Foto:archivo/Mauricio Garín
Ignacio Pellizzón | [email protected]
Los niveles inusitados de violencia que vive Rosario y la región vinculados a delitos narcocriminales tiene también su lado B: los pibes y pibas que son víctimas del negocio de los estupefacientes y se vuelven adictos “cada vez más rápido” y con “drogas de diseño”, según describió a Mirador Provincial la titular de la Asociación Nazareth, Eva Ferrigno, con sedes en Cañada de Gómez, Rosario, entre otras localidades.
La ONG se encarga de alojar a personas que padecen consumo problemático y necesitan ayuda las 24 horas del día para poder desintoxicarse y tratar su adicción. Se ocupan de “un problema invisible”, como lo define Ferrigno, quien cree que no se aplican políticas públicas de forma “eficiente” para mermar la situación.
La asociación plantea el “grave problema” que hay en lo que llaman el lado B de un macroconsumo y una naturalización que hay respecto a este tema. “Poder darles luz e interés a las adicciones y al aumento del consumo de drogas, es también combatir al narcotráfico”, indicó.
Ferrigno advierte que, en general, “hay mucha demanda” de diversos consumos, “hay un aumento del consumo problemático de sustancias”, tanto de las que son “legales” -bebidas alcohólicas, por ejemplo- como las ilegales.
Algo que genera mucha preocupación y alerta en la asociación es que notás que cada vez hay “más sustancias raras”. Se trata de estupefacientes de alto costo que generan “adicciones cada vez más rápido”. Ante este escenario, tuvieron que agregar un equipo de profesionales que están actualizando las investigaciones sobre las nuevas formas de consumo de manera periódica.
La titular de la ONG muestra enorme preocupación al detectar que “las edades han bajado notablemente” y que llegan con un “consumo agudo”. Ferrigno señala que “hoy se toca fondo” con mucha más facilidad que antes, sumado a las “historias terribles y violentas” con las que llegan, lo que expone el nivel de violencia que atraviesa a la sociedad “en todos sus sectores sociales”.
Lo que está de “moda” son las “drogas que son de diseño”. Hoy en día “están en auge”. Se trata de “combinaciones de distintos estimulantes” o “la famosa droga envenenada, que solía ser cocaína mezclada con fentanilo”. Este tipo de consumos “se han instalado muchísimo en los distintos sectores sociales”.
La psicóloga que dirige Asociación Nazareth asevera que “el efecto pandemia” provocó un “incremento notable” en problemáticas de salud mental. “No estábamos preparados para vivir un momento así”.
Actualmente la ONG atiende en la provincia de Santa Fe a más de 600 personas, lo cual es “mucho más que antes”. La demanda “es mayor” y tenemos, por lo menos, “40 personas en listas de espera”, que tratan de ubicarlas y derivarlas a otros centros. La realidad es que “las casas de alojamiento están a tope en general; es un fenómeno que estalló en pandemia”, dijo.
¿Hay salida?
Ferrigno expresó que detecta “algunos destellos en la oscuridad” con respecto a si se están afectando recursos y políticas aplicadas a esta problemática, pero “la labor es muy ardua” y no ve que se estén realizando “todos los esfuerzos” para prevenir el consumo y tratar adicciones.
“Nuestro trabajo y los equipos tampoco están remunerados por el trabajo importante que realizan. Esto sigue estando bajo un manto de invisibilidad. Por ejemplo, durante la pandemia, generaron protocolos difíciles de sostener para mantenernos abiertos y demás cuestiones que provocaron un quiebre en esto”, se lamentó.
Ahora, de a poco, “pareciera que hay un interés” en mejorar esta situación y eso “nos da esperanzas”, pero falta mucho. “Luchamos por reducir la demanda de consumo y mejorarle la calidad de vida a las personas”, cerró Ferrigno.
Los niveles inusitados de violencia que vive Rosario y la región vinculados a delitos narcocriminales tiene también su lado B: los pibes y pibas que son víctimas del negocio de los estupefacientes y se vuelven adictos “cada vez más rápido” y con “drogas de diseño”, según describió a Mirador Provincial la titular de la Asociación Nazareth, Eva Ferrigno, con sedes en Cañada de Gómez, Rosario, entre otras localidades.
La ONG se encarga de alojar a personas que padecen consumo problemático y necesitan ayuda las 24 horas del día para poder desintoxicarse y tratar su adicción. Se ocupan de “un problema invisible”, como lo define Ferrigno, quien cree que no se aplican políticas públicas de forma “eficiente” para mermar la situación.
La asociación plantea el “grave problema” que hay en lo que llaman el lado B de un macroconsumo y una naturalización que hay respecto a este tema. “Poder darles luz e interés a las adicciones y al aumento del consumo de drogas, es también combatir al narcotráfico”, indicó.
Ferrigno advierte que, en general, “hay mucha demanda” de diversos consumos, “hay un aumento del consumo problemático de sustancias”, tanto de las que son “legales” -bebidas alcohólicas, por ejemplo- como las ilegales.
Algo que genera mucha preocupación y alerta en la asociación es que notás que cada vez hay “más sustancias raras”. Se trata de estupefacientes de alto costo que generan “adicciones cada vez más rápido”. Ante este escenario, tuvieron que agregar un equipo de profesionales que están actualizando las investigaciones sobre las nuevas formas de consumo de manera periódica.
La titular de la ONG muestra enorme preocupación al detectar que “las edades han bajado notablemente” y que llegan con un “consumo agudo”. Ferrigno señala que “hoy se toca fondo” con mucha más facilidad que antes, sumado a las “historias terribles y violentas” con las que llegan, lo que expone el nivel de violencia que atraviesa a la sociedad “en todos sus sectores sociales”.
Lo que está de “moda” son las “drogas que son de diseño”. Hoy en día “están en auge”. Se trata de “combinaciones de distintos estimulantes” o “la famosa droga envenenada, que solía ser cocaína mezclada con fentanilo”. Este tipo de consumos “se han instalado muchísimo en los distintos sectores sociales”.
La psicóloga que dirige Asociación Nazareth asevera que “el efecto pandemia” provocó un “incremento notable” en problemáticas de salud mental. “No estábamos preparados para vivir un momento así”.
Actualmente la ONG atiende en la provincia de Santa Fe a más de 600 personas, lo cual es “mucho más que antes”. La demanda “es mayor” y tenemos, por lo menos, “40 personas en listas de espera”, que tratan de ubicarlas y derivarlas a otros centros. La realidad es que “las casas de alojamiento están a tope en general; es un fenómeno que estalló en pandemia”, dijo.
¿Hay salida?
Ferrigno expresó que detecta “algunos destellos en la oscuridad” con respecto a si se están afectando recursos y políticas aplicadas a esta problemática, pero “la labor es muy ardua” y no ve que se estén realizando “todos los esfuerzos” para prevenir el consumo y tratar adicciones.
“Nuestro trabajo y los equipos tampoco están remunerados por el trabajo importante que realizan. Esto sigue estando bajo un manto de invisibilidad. Por ejemplo, durante la pandemia, generaron protocolos difíciles de sostener para mantenernos abiertos y demás cuestiones que provocaron un quiebre en esto”, se lamentó.
Ahora, de a poco, “pareciera que hay un interés” en mejorar esta situación y eso “nos da esperanzas”, pero falta mucho. “Luchamos por reducir la demanda de consumo y mejorarle la calidad de vida a las personas”, cerró Ferrigno.
Además tenés que saber:
+ Noticias
La delegación de “La Invencible”, con 96 preseas, obtuvo el primer puesto en el medallero de la competencia interprovincial disputada en Mar del Plata. El podio lo completaron Córdoba y Río Negro. Los deportistas santafesinos, que compitieron en 36 disciplinas, habían sido elegidos tras participar de todas las etapas de Santa Fe en Movimiento.
Dejanos tu Comentario
Los comentarios realizados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de las sanciones legales que correspondan. Evitar comentarios ofensivos o que no respondan al tema abordado en la información.
En Portada / Santa Fe
En Portada / Entre Ríos