Ignacio Pueyo
De esta forma, el provincial de selectivos sub 12 fue el primero que volvió a desarrollarse bajo la órbita de la Federación Santafesina en lo que respecta a divisiones inferiores. Si bien está previsto que se desarrollen los distintos certámenes en cada una de las categorías de
inferiores, esta fue la primera prueba piloto.
La actividad se desarrolló en tres sedes: La zona norte jugó en Tostado, la centro en Esperanza, y finalmente la zona sur en Bigand. Los equipos del norte santafesino jugaron durante el fin de semana del 28 y 29 de mayo, mientras que los otros dos grupos hicieron lo propio entre el 3 y el 5 de junio. Los encuentros no fueron de carácter competitivo, por lo que en cada zona jugaron encuentros todos contra todos sin la necesidad de buscar un campeón.
En la zona norte participaron las ligas Reconquistense, Verense, Ocampense y Ceresina; esta última siendo la anfitriona. En la zona centro la Liga Esperancina recibió a la Santafesina, la Paivense, San Martín, Galvense y Rafaelina. Por su parte, en la zona sur la Liga Deportiva del Sur recibió a las ligas Sanlorencina, Casildense, y a la Asociación Rosarina.
Desde la Liga Esperancina de Fútbol, organizadora de la sede centro, el coordinador de selecciones de la institución, Pablo Blanco, habló sobre el formato no competitivo del certamen. “Este formato, consideramos desde el cuerpo técnico de la Liga, nos parece apropiado en estas edades, y que no se haga tan competitivo. Se pudo disfrutar un poco más, los chicos disfrutaron, más allá que sabían que no había un campeón. Internamente ellos sabían que habíamos andado muy bien, pero consideramos que en esa edad es importante esta competencia sin puntos, porque notamos que pueden disfrutar mucho más y no se tensionan tanto. También esto lleva a que la gente, los padres, el público en general, también disfrute más. No hay tanta tensión por el resultado. Creo que es algo importante que hizo la federación. Se habló con las ligas, y todas las ligas estuvieron de acuerdo. Es importante eso, que se compita, pero relajar un poco los momentos que tenemos de tensión, que casi siempre terminan en la tribuna con algún inconveniente. La verdad que se pudo disfrutar del torneo”, explicó Blanco.
Por otra parte, el presidente de la Liga Deportiva del Sur, Alberto Pesaola, habló de lo que dejó en Sub 12 en Bigand: “Realmente parecía todo nuevo, volver a algo que ya nos habíamos olvidado. Fue realmente todo muy positivo y muy lindo. Sobre todas las cosas vi muy bien el hecho que no se defina un campeón. Me da la sensación que a esa edad, si bien en muchas categorías ya competimos, creo que fue muy bueno volver de dos años sin jugar y que no se compita”.
Además, su par de la Liga Ceresina, Jorge Keller, también destacó lo hecho en la zona norte en la ciudad de Tostado el último fin de semana de mayo: “El balance es muy positivo gracias a Dios. Lástima que no nos acompañó el tiempo, porque hizo mucho frío, hubo lloviznas. Pero gracias a Dios todo se desarrolló de la mejor manera. Tuvimos unos anfitriones de lujo, tanto el Club San Lorenzo de Tostado como el Club Atlético Tostado, y sobre todo la organización y el apoyo que nos brinda la Federación Santafesina de Fútbol. Por ese motivo estamos muy
satisfechos y muy contentos.”
Todos los entrevistados destacaron la importancia de volver a desarrollar este tipo de certámenes después de dos años de pandemia. “Nosotros desde nuestra liga, desde el primer momento acompañamos a la Federación en toda esta clase de torneos y tratamos de jugar en todas las categorías. Se ha evolucionado internamente en la Liga, eso se refleja en los padres, porque antes había clásicos rivales de localidades que se fueron conociendo como grupos de padres, que se van mezclando, y se van aflojando los problemas internos. Yo no tengo otras palabras que no sean buenas, porque más allá que siempre vas a encontrar cosas para mejorar, lo que se logra con esta clase de torneos creo que no tomamos conciencia”, recalcó Pesaola.
Ambos presidentes hablaron además acerca de lo que conlleva la organización de este tipo de eventos. Jorge Keller explicó que una de las cuestiones a resolver siempre tiene que ver con el alojamiento de las distintas delegaciones, y en ese sentido desde las instituciones de Tostado el trabajo fue sumamente destacado. “Nosotros hemos viajado a Tostado para estar apoyando a la gente del CAT (N. del R: Club Atlético Tostado) y de San Lorenzo, que recibieron a todas las delegaciones el día fijado, los alojaron en los albergues que tienen los dos clubes, así que realmente en ese sentido se brindaron a pleno la gente de nuestros clubes afiliados en Tostado”, detalló el presidente de la Liga Ceresina.
Desde el sur provincial, Alberto Pesaola también se explayó acerca del trabajo realizado en la Liga, sobre todo por parte del vicepresidente, y al mismo tiempo el esfuerzo de la gente de Bigand para poder albergar la gran cantidad de gente que nuclea este tipo de eventos. “La verdad que nosotros, saliendo de las grandes ciudades como Rosario o Santa Fe, siempre buscamos en dónde podemos alojar a los chicos, y ahí en este caso hubo un trabajo excelente del vicepresidente Eduardo Balduzzi. Buscamos la localidad de Bigand, porque tiene alojamiento a nivel provincial dentro del cuerpo de bomberos. Eso hizo que tengamos todo el acompañamiento de parte de una localidad, más allá de toda la Liga, y eso es muy bueno”, explicó.
Trasladándonos a los aspectos deportivos que abarcan este tipo de certámenes, Pablo Blanco explicó el gran trabajo que deben hacer los cuerpos técnicos y los dirigentes para llevar adelante los distintos selectivos de juveniles. En el caso de la Liga Esperancina, al igual que en muchas otras ligas de la provincia, las distancias son una complicación para reunir a los jugadores y realizar los entrenamientos.
“La liga tiene 27 clubes, y si uno toma las distancias, hay hasta 150 o 200 kilómetros que tienen que viajar los chicos todas las semanas para venir a entrenar. Hay una gran participación de los clubes, y ni hablar el agradecimiento a los padres, que son quienes traen y llevan a los chicos a los distintos entrenamientos. Es un sacrificio de tiempo y también económico de los padres, así que siempre agradecidos nosotros a los clubes y a los padres para poder llevar adelante los selectivos, porque dependemos exclusivamente de ellos” manifestó el coordinador de selecciones de la Liga Esperancina.
Además, sobre el desarrollo del certamen, Blanco declaró que: “Uno siempre quiere tratar a estas edades que el resultado no sea la base de todo, pero eso acompaña el proceso que venimos realizando desde 2018. Es un proceso de cuatro años, que paró dos años por pandemia, y al que se le dio la continuidad este año. En la categoría Sub 12 que jugó este torneo provincial por suerte tuvimos el apoyo de los clubes en cada entrenamiento.” Blanco, que también está a cargo de la preparación física de los selectivos, también explicó que este certamen fue algo más corto que los anteriores, con menos cantidad de partidos, pero que de todas formas el balance es sumamente positivo.
“Objetivo cumplido con la participación principalmente de los chicos en el selectivo. Se pudieron llevar adelante algunos trabajos que habíamos hecho con ellos en años previos, así que el proceso se viene manteniendo”, agregó.
Se viene la Copa Santa Fe
La Copa Santa Fe, en sus ramas masculina y femenina, dará inicio el fin de semana del 24 de junio. En el caso del certamen femenino, se desarrollará entre los días 24 y 26 de junio en la ciudad de Rafaela. En total serán 16 los equipos participantes, divididos en cuatro zonas de cuatro equipos cada una. Una vez finalizada la fase de grupos, se disputarán cuatro copas: oro, plata, bronce y estímulo, de las cuales saldrá un campeón de cada una.
Por su parte, la Copa Santa Fe en la rama masculina iniciará justamente el fin de semana del 24 de junio, y se jugará a ida y vuelta en sus tres primeras etapas. Los octavos, cuartos y semis se definirán a un partido, mientras que la final se disputará a dos encuentros, el primero de ellos entre el 23 y 24 de octubre, y la vuelta entre el 28 y el 30.
