Ignacio Pellizzón


Tres personas de Rosario realizaron una denuncia penal por verse afectados en su salud ante el exceso de humo proveniente de los incendios en las islas que contaminan el aire de la ciudad. La presentación judicial se realizó en el Ministerio Público de la Acusación (MPA) y la causa es por delito de lesiones.

En base al planteo que se presentó en la Justicia, los afectados, entre los que se encuentra el ex concejal rosarino, Jorge Boasso, argumentan que las quemas en el Delta del Paraná “afecta de forma directa” su salud.

La denuncia, que lleva el nombre de Jorge Boasso, Adriana Acosta y Andrés Cánepa, está acompañada de importante documentación probatoria, la cual respaldaría lo que se está denunciando y la causa.

“Nos encontramos legitimados atento el menoscabo en la salud y en nuestra integridad física y moral nos ocasiona el humo de las quemas e incendios intencionales producidos en las islas del Delta del Alto Paraná”, agrega el planteo presentado este lunes en Fiscalía.

Los denunciantes entienden que su salud se ve deteriorada expresamente por respirar aire intoxicado. Por eso, presentaron diagnósticos médicos que indican esto. En el caso de Acosta, señala que sufre de una “faringitis alérgica” producto del humo de las islas, mientras que Cánepa señala que recibe atención médica por presentar “cuadro clínico de dificultad respiratoria, bronquios y tos, desencadenado por la presencia de aire contaminado por humo, en un paciente con enfermedad respiratoria bronquial como antecedente”, en base al diagnóstico del neumonólogo Gabriel Temporelli.

Por su parte, el ex concejal, presentó diagnóstico de la oftalmólaga Sandra Echarri, quien certificó que lo atendió reiteradas veces por “cuadro de enrojecimiento ocular, lagrimeo, sensación de cuerpo extraño, fotofobia (encandilamiento con la luz) y visión borrosa con inestabilidad en el film lagrimal, ocasionando lesión córnea y conjuntiva, generando un cuadro querato-conjuntiva alérgica. Factores ambientales como la contaminación que ocasiona la quema de pastizales en la isla podrían influir directamente en su cuadro clínico”.

En la denuncia también agregaron mediciones de partículas en el aire, dentro del casco urbano, por encima de lo tolerable según la Organización Mundial de la Salud (OMS). En este sentido, “Jorge Giometti, titular de la estación SAI, aseguró que la medición realizada el 10 de Julio pasado, arrojó una cifra 150 veces superior a lo esperado”.

Esto revela que el humo del día 10 de Julio que se respiró en Rosario puso en riesgo la salud de la población. “Fue como cuando tiramos agua para apagar las brasas de un asado", graficó el observador en la denuncia.

A su vez, las víctimas indican que la intencionalidad de estas quemas fue probada, como consta en la causa “Baggio Rufino y Otros sobre Incendio”, tramitada en el juzgado federal de Paraná.

“En dicha causa se encontraría probado que la mayoría de los casos se fundan en cuestiones económicas ya que se vienen llevando a cabo incendios y quemas, de manera histórica por los propietarios y/o ocupantes de dichas tierras, en razón de propender así y de manera inescrupulosa, a la sobreutilización ganadera de dichos pastizales", indica la presentación judicial.

“Es así que amén de la degradación que estas quemas indiscriminadas provocan sobre la flora y la fauna del lugar y de las cuales las sucesivas administraciones de la provincia de Entre Ríos han ignorado a pesar de ser sistemas protegidos mediante leyes ambientales, motiva la presente la contaminación que sus resultados, es decir el humo tóxico y las cenizas trasladadas de acuerdo a las condiciones climáticas hacia esta región, genera en nosotros los habitantes de nuestra ciudad de Rosario y sus resultados nocivos en nuestra salud”, concluyó.

La visita de Cabandié
Mucho se esperó la visita del ministro de Ambiente de la Nación, Juan Cabandié, y finalmente sucedió. Llegó este martes al Juzgado Federal de Victoria y presentó nueva información para ampliar la denuncia en relación a los incendios en las islas.

Tras la reunión con el juez a cargo de la causa, Federico Martín, el ministro afirmó que la quema de pastizales es “intencional” y que “las provincias son quienes deben determinar cuál es el uso que se le da al humedal”.

“Traemos información a partir de la geolocalización que surge de los faros de conservación instaurados en la zona del Delta. Nos parece una situación penosa asistir permanentemente por estos focos, que tienen distintas intencionalidades: inmobiliarias, ganaderas, agrícolas”, siguió Cabandié.

El ministro argumentó que su cartera no tiene poder de policía ni poder para indagar a los responsables de los campos y adelantó que el fiscal “iba a comenzar con audiencias indagatorias a titulares de campos”.

Por eso, “solicitamos a la provincia que dé los datos catastrales para que, al determinar esos datos, con la geolocalización que aportamos de la Nación la Justicia pueda determinar quiénes son los titulares de esos campos donde se prende permanentemente”, y cerró: “Las provincias son las que deben determinar el uso del humedal; no podemos, desde una ley del Congreso, determinar su uso”.