La capital entrerriana celebra este domingo sus 210 años. Pero cuando empezamos a investigar la historia de Paraná, nos encontramos con que nunca fue fundada. Nos sorprendemos al descubrir que, en realidad, la fecha elegida para celebrar es la de la Asamblea del año XIII, como se conoce al documento que elevó al rango de villa a muchos poblados, entre ellos, Paraná. Mirador Entre Ríos consultó a Raúl Avellaneda, autor de los libros “Paraná y sus enigmas” e “Históricamente Paraná”.
Raúl es un apasionado de la historia y enamorado de la ciudad paisaje, como se la conoce a Paraná dados sus inigualables atardeceres a la vera del río. Avellaneda polemiza con los festejos de los 210 años de nuestra ciudad y explica: “La fundación de las ciudades españolas eran, como hemos visto en muchas figuras, un mojón, un decreto clavado en ese mojón y un sacerdote bendiciendo el lugar y allí iniciándose la diagramación de una ciudad. Así nacen todas las ciudades o la mayor parte de las ciudades de nuestro país, diagramadas, bendecidas y con una fecha donde en nombre de los reyes católicos, el adelantado hacía la fundación y le daba su nombre. Bueno, Paraná todo eso no lo tiene, no lo tiene ni hace 210 años, ni antes”.
Avellaneda se dedica al periodismo, aunque no estudió comunicación. No hicieron falta las aulas para que la pasión por la radio lo encuentre hace más de 30 años cuando comenzó su programa. Durante horas, Raúl y su equipo conformado por Jorge y Ernesto Remedi, se dedicaban a investigar los casos más llamativos, misteriosos y hasta terroríficos que sus oyentes aportaban. Así, el programa recibía diversos llamados de vecinos que querían compartir sus vivencias en la capital provincial para encontrarles alguna explicación. “Enigmas” era el título del programa que comenzó emitiéndose en radio FM Capital y pasó por diferentes emisoras.
VIAJAR EN EL TIEMPO
Luego transformado en libro bajo el título “Paraná y sus enigmas” está compuesto por 64 crónicas, de las cuales 32 se dedican a desarrollar la historia pasada de la ciudad y 32 tienen un formato de cuentos esotéricos. En estos textos se rescatan aquellos escritores de la ciudad que narraron sobre ella y nos ayudan a que hoy la conozcamos tal como fue en aquellas épocas de conformación nacional.
“La propuesta es ser un detonante de recuerdos y sensaciones para las personas mayores, y para los más jóvenes la idea es que conozcan más su ciudad”, explica Avellaneda. Este libro es una invitación a viajar en el tiempo, a transitar nuestra Paraná desde los ojos de un turista, a redescubrir los espacios más conocidos bajo la tutela de quienes conocieron a la capital provincial en aquellos años en que fue Capital de la Confederación. Finalmente, el autor del libro confiesa emocionado: “Soy un enamorado de mi ciudad” y realmente es algo que se puede sentir al compartir una conversación con Raúl.
“Si bien sabemos que Paraná no tiene fecha de fundación, el 25 de junio se conmemoran los 210 años de que fue declarada Villa, y esa fecha se toma como un bastión, un punto de partida de una ciudad que ya tenía historia y que ya se venía conformando”.
Para recorrer y entender un poco la historia, Avellaneda nos invita a viajar “a fines del siglo XVII y principios del siglo XVIII, es decir, a fines del 1600, principios del 1700, se empieza a conformar lo que se denominaba la Baxada, era muy común escribir con X en el idioma castellano. La Baxada fue conformándose con un caserío con gente de Santa Fe, porque este lado de la costa era muy rico: había mucha madera de muy buena calidad, había mucho ganado vacuno, había también caballos, pero básicamente un ganado vacuno cimarrón salvaje, que se podía capturar, se podía manufacturar y así se empieza a manufacturar la carne, el cuero, empiezan a surgir las industrias en este lugar”.
Luego, continúa: “También era muy importante todo lo que era la zona calcárea de las barrancas del Paraná, que servían para fabricar la cal y para comercializar. Era un lugar muy rico y tenía la ventaja de que los grupos aborígenes eran medianamente poco salvajes y no estaban tan cerca del lugar. Es decir que así se fue conformando un caserío que tiene antecedentes, en el 1700”.
INDEPENDENCIA DE SANTA FE
Pero, como sabemos, en nuestro país las capillas son la señal del comienzo de los poblados, en ese sentido, Avellaneda explica: “Si bien no hay antecedentes claros de cuándo se empieza a conformar ese caserío, en 1730 se hace la primera iglesia en la Baxada con una imagen de la Virgen del Rosario, la imagen histórica que todavía conservamos en la Catedral, que fue traída desde el rincón de Santa Fe. De allí en más se toma como 1730 una casi fundación de Paraná. Pero el 25 de junio de 1813, la famosa asamblea del año 13 le da carácter de población a distintos lugares, varios de ellos en Entre Ríos, entre ellos Paraná, que pasa a ser villa”.
Ante la consulta sobre qué cambios trajo esta designación de villa, Raúl comenta: “Ser villa le significa una independencia en cuanto a lo gubernamental y en cuanto a lo religioso de Santa Fe. Es decir, Paraná tiene sus primeras autoridades políticas, tiene sus primeras autoridades eclesiásticas y se empieza a conformar en lo que luego sería la ciudad”. Sin embargo, Avellaneda aclara: “hoy hablamos de 210 años de Paraná y no se puede hablar de la fundación de Paraná, porque reitero, Paraná no tiene fundación”.
En sus libros, tanto en “Paraná y sus Enigmas”, como en “Históricamente Paraná”, hay referencias a esa conformación de lo que fue nuestra ciudad desde sus principios. También una reseña de lo que es el escudo de la ciudad de Paraná que nos legó don Santos Domínguez y Benguria, allá por 1877, en el que se pueden apreciar todas esas riquezas que hacían grande a Paraná y que hacían un lugar interesante para el desarrollo.
Ante la consulta sobre lo que hoy sobrevive, 210 años después, Avellaneda dice: “De aquel Paraná de 1813 tal vez queda la idiosincrasia de la ciudad y queda, sobre todo, una historia que nace mucho tiempo antes que sea declarada villa y creo que los paranaenses tenemos la obligación de conocer. Es muy triste y erróneo cuando se escucha que se están festejando 210 años de la fundación, cuando es un gran error histórico. Reitero y hay que machacarlo, Paraná no tiene fundación”.
Pero Paraná no es la única cumpleañera, el 25 de junio también es momento de celebración en la otra costa, en Concepción del Uruguay, porque La Histórica también celebra su cumpleaños. Al respecto, Avellaneda explica: “Es la casualidad nada más que las dos tienen la fecha 25 de junio. Concepción del Uruguay fue fundada por Tomás de Rocamora, que fue un adelantado que recorrió Entre Ríos, fundó ciudades e hizo una historia muy interesante sobre el territorio entrerriano”.
CELEBRACIÓN
Para hablar con propiedad, hoy celebramos los 210 años de elevación a Villa de la Baxada del Paraná, territorio que fue creciendo y cambiando hasta llegar a ser hoy la capital de Entre Ríos.
En ese marco, durante todo el mes de junio se realizaron propuestas gratuitas impulsadas por el Municipio. Desde ferias de emprendedores y artesanos, certámenes de cocina, propuestas en los barrios con actividades deportivas y lúdicas, hasta recitales en vivo en el Teatro 3 de Febrero y al aire libre. Todas esas propuestas fueron pensadas para celebrar a una ciudad que sigue creciendo y que busca ser un punto turístico a nivel nacional con sus bellos paisajes y su atrapante naturaleza.
El broche de oro estará puesto en este domingo 25, cuando en la Plaza de las Colectividades se presenten en vivo los 12 Monos y Los Auténticos Decadentes, además de lo que promete ser “la choripaneada más grande del mundo”. La costanera baja de la ciudad será nuevamente el epicentro de la celebración y las barrancas del Patito Sirirí funcionarán como un anfiteatro gigante que tiene, ni más ni menos, que el río y el islote Curupí de fondo.
Así, en la mixtura de barrancas, río amarronado, islas e islotes, mate amargo y música se celebrarán los 210 años de esta ciudad que si bien no fue fundada como hubiese correspondido, y pese a comenzar con un pie izquierdo, hoy enamora a sus habitantes y ofrece cada vez más atractivos culturales y naturales para el turista.