José Prinsich


Pasaron varios días desde que Ayrton Londero cruzó victorioso la bandera a cuadros en San Juan pero aun así no cae en la cuenta de lo que consiguió. De vez en cuando, el hombre del Martínez Competición atina a pellizcarse la piel para confirmar que no estaba en un sueño y que el título del TC Pista era todo suyo.


Desde pequeño, el ramirense anheló la llegada de este momento. Una marea de emociones emergió el domingo 20 de diciembre cuando se alzó con la copa en la provincia cuyana. No era para menos. Era la primera vez que un piloto de la Capital Provincial de la Juventud llegaba tan alto en el plano nacional. Asimismo, se convirtió en el segundo entrerriano en quedarse con el campeonato del TCP luego de Próspero Bonelli (Concepción del Uruguay) en 2007.


El Negro había tocado el cielo con las manos y su rostro denotaba en todo momento felicidad. Se había cumplido el sueño del pibe: conseguir el pase a la máxima categoría del automovilismo, el Turismo Carretera. “Todavía no caigo porque es un gran logro y esto no se logra todos los días. En este deporte son más las que se pierden que las que se ganan. Hoy en día, al nivel que estamos corriendo, es más difícil. Así que vamos a disfrutarlo. A la gente le debo el cariño que me han brindado hoy. A este día no me lo voy a olvidar nunca más en mi vida”, expresó emocionado a MIRADOR ENTRE RIOS.

Una caravana interminable 

Como en todo pueblo, la siesta es un mandato a cumplir. Pero siempre hay una excepción a la regla y más si viene con la copa bajo el brazo. Ayrton llegó a su ciudad natal el lunes pasadas las 13.30, donde fue recibido por una multitud de simpatizantes, amigos, familiares y vecinos. No faltaron las banderas del óvalo y los globos amarillos, referenciando al canario. La alegría en General Ramírez era total. Las redes sociales daban cuenta de ello y las imágenes de la previa eran elocuentes. Con el móvil de los Bomberos Voluntarios y personal municipal, sumado al acompañamiento de la policía, dio inicio una extensa caravana. La misma comenzó en el acceso, sobre calle República de Entre Ríos, y se extendió por todos los barrios de la ciudad. Pese a la hora y el calor, los vecinos salieron de sus hogares y puestos de trabajos para saludar a Londero, que efusivamente levantaba la copa y saludaba a todos. Filas interminables de autos, camionetas y motos desfilaban junto al piloto. También hubo un grupo de audaces gurises que pedalearon todo el recorrió y a viva voz gritaban: “¡Vamos Negro!”. Era la fiesta de un pueblo fierrero. Nadie durmió para ver los festejos del campeón.


“Hoy vinieron a celebrar este campeonato que es para Ramírez, para mí y la marca Ford. Quiero agradecer al municipio, al intendente Gustavo Vergara y a toda la gente que me está brindando el cariño y afecto cada fin de semana”, expresó el joven en el Parque de la Democracia donde continuó la actividad hasta las 16.


Luego de las palabras alusivas, el presidente municipal Gustavo Vergara y el Director de Deportes César Omarini le hicieron entrega de un presente. Seguidamente, Gabriel Rodríguez, cantante local y fiel seguidor de las carreras del Negro, le dedicó un tema que él mismo le escribió: “Gurí Londero”. Para culminar la jornada, el campeón firmó autógrafos y se sacó fotos con los presentes.


“Mi papá (Javier Londero) debe estar totalmente orgulloso y feliz de lo que hemos conseguido. Nosotros como familia siempre estuvimos muy unidos. Tuvimos la pérdida de mi abuela, después de mi viejo y luego mi abuelo con una tía también. Fue muy duro todo y siempre tuve intacto el sueño de llegar al Turismo Carretera por mi papá. Le debo la vida a mi mamá (Marisel Grillone) porque me ha acompañado siempre, incondicionalmente, como así también mi hermana, mis tíos, primos. La verdad que a pesar de todo siento un gran cariño por ellos”, culminó el Negro, quien también recibió las felicitaciones del Gobernador de la Provincia, Gustavo Bordet.

Micrófono abierto

Consultado sobre el triunfo de su colega Mariano Werner en el TC, el Canario expresó que “significó mucho para mí y lo demostré todo el fin de semana. Estaba esperando el campeonato de él. Son muchas las carreras que lo vi ganar. Estuve en el campeonato del 2010 cuando lo perdió. Estoy tocando el cielo con las manos. Estoy llegando al TC bajo el ala del Gurí. Logramos un campeonato para Entre Ríos, que junto con el del TC son los más importantes de Argentina. Lo logramos con Mariano y con Ford. La gente de Entre Ríos está muy contenta con el logro este”.


El hincha de Boca Juniors tampoco se olvidó de Omar “Gurí” Martínez, a quien no lo considera como un jefe de equipo sino un ídolo, referente y amigo. “Tengo una relación muy estrecha, donde tenemos una gran confianza”, sostuvo. En cuanto al equipo técnico puso de manifesto que “es una gran familia. Hace tres años y medio que llevamos trabajando con los mismos chicos. Nos entendemos muy bien y eso es primordial para poder estar en un nivel como el que estamos”.


Ya un poco más relajado, Ayrton tiene la mente puesta en el futuro. “Tenemos que salir en comunicación con todos los sponsors y redondear un presupuesto más alto de lo que era el TC Pista porque el TC demanda más. Es un desafío nuevo para mi vida, que va a cambiar rotundamente. Llegamos al TC siendo campeones, no es poco mérito y eso me tiene que ayudar para conseguir el presupuesto para afrontar este desafío”.

Toda una odisea

El camino para la obtención del campeonato no fue para nada fácil. El piloto de Ford tuvo que pelear hasta la última fecha, disputada en el famoso Villucum, para levantar la Copa de Plata. Los cinco podios conseguidos en el año no le eran suficientes ya que necesitaba el triunfo para poder consagrarse.


“En la serie hicimos una seria clasificaciónpara lograr la pole para la final”, manifestó. Con el semáforo en verde se puso en marcha la última final del año, que estuvo reñida desde la primera hasta la vuelta quince. El mano a mano entre Londero y Elio Craparo fue contundente y ambos se disputaron el primer puesto.


El abandono de Germán Todino y el retraso de Andy Jakos, dos fuertes candidatos a quedarse con el título del TCP, fueron determinantes y motivaron aún más al corredor del Departamento Diamante. “Llevábamos una concentración al máximo. La única forma de salir campeón era logrando la victoria y tenía la chance de hacerlo. Fuimos a todo o nada en todas las vueltas”.