Lalo Falcioni [email protected]


Rosario Central y Newell's pasaron una Navidad austera, con muchos deseos de un futuro mejor, pero con pocas razones para levantar las copas luego de un 2021 irregular y bastante amargo. Como casi siempre ocurre, lo saliente sigue siendo la pasión inclaudicable de sus hinchas, que nunca pierden el fervor y la esperanza de contar con un equipo que vaya por grandes objetivos. O por lo menos que no se pierda en la mediocridad general de un fútbol argentino con pocas luces.

Este fin de año encuentra a los dos clubes grandes de Rosario en la etapa de reorganización de sus planteles, con algunos jugadores importantes que decidieron quedarse y otros que se marchan o que le dicen adiós para siempre a las canchas. Y mientras el Covid comienza a ser otra vez una amenaza por estas latitudes -en lo único que nos parecemos a Europa-, el virus de la incertidumbre es el que más contagia entre canallas y leprosos.

Dos buenas y muchas dudas
Todavía no es tiempo de balances definitivos porque esta semana que viene puede ser importante para definir cuestiones deportivas e institucionales en los clubes, pero Central tiene dos buenos motivos para festejar a esta altura del año: las continuidades de los referentes Marco Ruben y Emiliano Vecchio. En torno a ellos dos, el también ratificado en su cargo "Kily" González armará el plantel para 2022.

A partir de ahí, el técnico, la dirigencia y el director deportivo, tienen una lista larga de nombres para sumar a la plantilla, pero por el momento son negociaciones empezadas y bastante lejos de un final, que puede ser feliz o no.

Después de la lesión de "Fatura" Broun, que le demandará una larga recuperación, y la partida de Josué Ayala, en Central están convencidos de que deben ir por un arquero. El apuntado es Gaspar Servio, que este año atajó en Guaraní de Paraguay y fue pedido expresamente por el "Kily". En principio, sería para pelear el puesto con el pibe Juan Pablo Romero, a la espera del regreso de Broun.

Los otros nombres que están en la agenda canalla son los de Mauricio Martínez, Juan Cruz Komar y Walter Montoya. Al menos son los tres que trascendieron y que incluso fueron admitidos por el mánager deportivo Raúl Gordillo. "Las gestiones se complican porque si no es el club, es el jugador o el representante. Toda negociación tiene su parte de impedimento en la logística, pero estamos bien rumbeados", dijo el "Mono".

De acuerdo a lo que expresó Gordillo, el que estaría más cerca de acordar es "Caramelo" Martínez, defensor que ya pasó por Central y dejó un buen recuerdo: "Estamos acordando con el jugador los números. Una vez que hagamos eso, iremos por el club. Estamos bien, pero mañana capaz Racing sale con cualquier locura. Hay que esperar, pero soy optimista", confió.

En cuanto a las bajas, el volante Leandro Desábato eligió rescindir su contrato después de una temporada sin continuidad: "Es entendible su deseo de jugar, pero pienso en el lugar en el que están: no pelearla en Rosario Central me parece entregarse", criticó Gordillo la actitud del jugador.

Cambia, todo cambia
A diferencia de Central, en Newell's corren vientos de cambio total. Y más que una brisa leve, parece un vendaval que quiere arrasar con todo. En este último tercio del año, en el club del Parque Independencia hubo cambio de comisión directiva, renovación de cuerpo técnico y se fueron Maxi Rodríguez y "Nacho" Scocco, los dos máximos referentes que le quedaban al plantel leproso. "Lo dejamos solo a Pablo (Pérez), que ahora tendrá la responsabilidad de liderar el plantel", describió con justeza Scocco el día que se despidió en el Coloso.

Mientras el nuevo DT Javier Sanguinetti sigue anotando nombres en su lista de posibles refuerzos -en la presentación dijo que necesita al menos cuatro de jerarquía-, la dirigencia por ahora parece más preocupada por ajustar los números que por otra cosa.

"Tenemos que atacar el cáncer que nos carcome. Deportes amateurs, Malvinas y el colegio deben dejar de ser deficitarios", fue la llamativa frase que dejaron los encargados de la tesorería rojinegra esta semana cuando presentaron los primeros resultados de la auditoría que encargó la comisión encabezada por el presidente Ignacio Astore. A muchos les sonó como una declaración del pasado más rancio y nocivo que tuvo Newell's.

En estas horas, los directivos y el gerente del fútbol, Julio César Saldaña, están ocupados en las extensiones de los contratos de Julián Fernández, Jerónimo Cacciabue y Diego Calcaterra. Y negocian para lograr las permanencias de los zagueros Cristian Lema y José Canale, que no resultarán sencillas.

Entre las probables incorporaciones se anotan los defensores de Colón, Gonzalo Piovi y Paolo Goltz, el zaguero uruguayo Diego Polenta y el delantero paraguayo Luis Amarilla. Se iría el arquero Alan Aguerre y Sanguinetti ya habló con Mauricio Arboleda, a quien dirigió en Banfield.