Gisela Mesa
[email protected] Marcela Arroyo es cantante, compositora, coach vocal y diseñadora gráfica. Nació en Buenos Aires y desde pequeña estuvo rodeada de música; una madre actriz de radio infantil, gran melómana y un padre que tocaba el bandoneón en cada reunión familiar. Con cinco años, ya cantaba tangos y desde la primaria se paseaba por el escenario con un grupo folclórico infantil. Estudió Canto Popular en el Conservatorio Manuel de Falla, complementándolo con Teatro Musical en la Fundación Julio Bocca.
Desde el año 2000, con base en Suiza, ha llevado su música a diversos escenarios europeos: Doppelkegel en Munich, Neumünster y Volkshaus en Zurich, L’Alhambra y Bâtiment BFM en Ginebra, Conservatoire de Courbevoie Paris, Stadtcasino Basilea, Kulturcasino Berna, Luzerner Theater, Staatstheater Darmstadt.
Mirador Provincial entrevistó a la artista para hablar de la esencia de la vida, donde nos cuenta sus propias vivencias con la música. Sin dudas esta compositora presenta sus canciones hilando las historias, mostrando sus capacidades escénicas y teatrales.
-¿Cómo surgió tu relación con la música?
-Vengo de una familia muy musical. Mi madre era artista radial infantil y es una gran melómana que escucha música todo el día. Ese fue mi primer contacto con la música. Escuchar música jugando, ordenando, cocinando, haciendo la tarea…
-¿Cómo llega el tango a tus oídos?
-Mi viejo tocaba el bandoneón de hobby y me enseñó mi primer tango que fue «María». Además de los casettes de tango sonando en nuestro equipo todo el día.
-Parece una pregunta simple, pero lo sencillo enmarca sensaciones ocultas ¿Qué te pasa con el tango?
-El tango me emociona. Y me pasa desde chica esto. A mí el tango no es que me esperó, sino que forma parte de mi vida desde que nací. Crecí en Buenos Aires, una ciudad que respira, silba, grita tango. Creo que hasta el caminar del porteño tiene ritmo de tango.
- Háblame del barrio donde creciste ¿Qué recuerdos tenés de tu infancia?
-Tuve una infancia mágica en una esquina entre Belgrano y Villa Ortúzar. Un barrio de casa bajas donde jugábamos los largos veranos en la vereda con los vecinos o en nuestro patio bajo un limonero que nos regalaba sombra. Me acuerdo de miles de historias que contaban los vecinos. El de enfrente era afinador del Teatro Colón y tenía una casa llena de pianos. Otra vecina tenía un jardín lleno de plantas y me contaba que curaba con cada una de ellas, mientras me hacía un chocolate. Muchos de estos recuerdos se volvieron canción.
-¿Quiénes son tus referentes musicales?
-Una mezcla muy heterogénea e infinita, que empieza con la gran Mercedes Sosa, María Graña, Karen Carpenter, Ella Fitzgerald, Violeta Parra, Elis Regina, Esperanza Spalding y la lista sigue… con Luis Alberto Spinetta, Pedro Aznar, Carlos Gardel, Juan Falú, Juan Quintero, Carlos Aguirre, Jorge Fandermole y así hasta el infinito…
-El dolor, la herida, están muy presente en el tango, en la añoranza de los argentinos en el exterior. ¿Qué aroma, paisajes más extrañas?
-Extraño el perfume de los alfajorcitos de maicena recién horneados que hace mi mamá y en general el perfume que hay en su casa. Extraño el paisaje familiar de mesa grande de domingo compartida.
-“La voz no basta para ser cantante, precisa que el sujeto sea inteligente, estudioso, observador…. que esté dotado de una voluntad firme, y que su fe en el arte sea inquebrantable “, ¿Coincidís?
-Yo lo expresaría de otra manera, no basta con el regalo de un lindo timbre de voz o de un talento para cantar naturalmente. Eso es solo un pequeño porcentaje de lo que se necesita para ser un cantante profesional. Yo lo comparo con un Iceberg. La punta que sobresale del agua es lo que te viene de cuna, toda la gran masa sumergida es el trabajo, práctica, estudio, esfuerzo y ganas que le vas a poner para lograrlo.
-¿Qué enfoques incluís en tus composiciones?
-Siempre trato de escribir desde la positividad, invitando al oyente a automirarse, cambiando el foco que en este momento está puesto tanto en el afuera. Además siento que a través de mis canciones abrazo al oyente con mi voz y lo acompaño en su camino. Para mí esto es lo más maravilloso que puedo dar y recibir
- ¿Qué semblantes de tu biografía se reflejan en tus canciones?
-Muchas canciones son autobiográficas hablan de mi infancia, de mi barrio, de mi experiencia como mamá, de mi forma de ver la vida. En definitiva pienso que como contadora de historias no hay nada más auténtico que contar mis propias historias.
-¿Crees que el tango está abriéndose a otras posibilidades más igualitarias con las mujeres?
Si, creo que las mujeres cada vez tenemos más lugar en este género, que es tan de hombres. Y queda todavía mucho por hacer para poder hablar de igualdad.
-¿Cómo has ido evolucionando a través de tus composiciones?
-Estoy en constante evolución. Creo firmemente en que es una cuestión de cantidad. Más canciones escribís, más entendés el proceso. Estoy aprendiendo a componer desde distintos instrumentos, a crear las canciones desde el texto o desde la melodía. Y sé que solo la práctica hace al maestro. Así que hago de la escritura de canciones un ejercicio diario.
-Háblanos de tu cuarto disco llamado De Par en Par.
-De Par en Par es un disco formado mayormente por canciones propias y algunas joyitas prestadas del cancionero popular argentino. Yo les digo canciones mestizas, libres desde la forma y con la raíz en el tango y el folklore, mezcladas con tintes jazzeros. El productor artístico es Pablo Allende, guitarrista, quien como yo vive en Suiza. Juntos armamos un grupo de músicos destacados, que se pusieron la camiseta para este proyecto: los argentinos Federico Abraham en contrabajo, Pablo Lacolla en percusión; y de invitados el pianista peruano César Correa, el trompetista suizo Matthieu Michel y en percusión orgánica Diego Clark, también desde Argentina.
Vamos a estar presentando este material el viernes 22 de julio en Circe fábrica de arte, Ciudad de Buenos Aires, junto a Pablo Allende (guitarra, arreglos, coros) y Juan Pablo Navarro (contrabajo). De invitada de lujo la tendremos a Georgina Hassan.
Y el sábado 23 de Julio nos presentamos en Casa Cultural Makandal, La Plata, junto a Pablo Allende, compartiendo la fecha con Omar Gomez Grupo. Están todos invitados a esta fiesta del reencuentro y de la música.
-¿Qué se siente retornar a tu país?
-Una mezcla tremenda de emociones, sobre todo después de estos años donde no se podía viajar y las distancias se sintieron más, aún con todas las tecnologías de por medio.
-¿Cuál es tu próximo proyecto del cual puedas adelantarnos algo?
Cuando vuelva a Europa se viene la segunda gira de presentación del disco hasta fines de Enero de 2023. La primera gira estaba todavía en el marco de la pandemia con aforo reducido.
Y ya estoy escribiendo nuevas canciones y craneando un próximo disco de canciones propias con colaboraciones. ¡Qué la música no se detenga!