Sabina Melchiori
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Damián Lemes nació y vive en Gualeguaychú. Tiene 41 años, está casado, y tiene dos hijas: Miguelina y Antonia. Arquitecto de profesión, abocado al desarrollo de planos hápticos para personas con ceguera y disminución visual y, como si eso fuera poco, también canta y compone obras maravillosas que le hacen honor a esta tierra pintada con el mestizaje de diversas corrientes culturales.

En sus casi dos décadas con la música ha recorrido innumerables escenarios del país y el exterior. Lleva editados cuatro discos como solista: Canciones del gajo al suelo (2011); Hijas del aguacero (2015); Obrador (2018); y ¡Guarango! (2020).

Participó de importantes festivales como el Festival Nacional de Folklore, en Cosquín; el Festival de Doma y Folklore en Jesús María, el Festival de Música Popular en Baradero, donde además ganó el certamen Pre Baradero como Mejor Solista Vocal; la Fiesta Nacional del Chamamé en Corrientes, y casi todos los festivales y fiestas populares de la región litoral, algunos como parte de La Sincopada, otros como vocalista del Ensamble La Creciente, como parte de la delegación de su provincia, o con su proyecto solista. También realizó una gira por Europa.

Ha sido convocado por referentes del género como Raúl Barboza, Chango Spasiuk, Ramón Ayala, Carlos Aguirre y Liliana Herrero para compartir diferentes escenarios. Varios de ellos han participado en sus discos. Recibió reconocimientos como la Distinción al Mérito Artístico otorgada por el Senado de la provincia de Entre Ríos.

“Con Antonio Tarragó Ros, referente indiscutido de la música de la región como invitado, cada rincón sonoro, cada detalle pensado desde la belleza fluye en este disco con que ahora sigue su huella de hombre de aquellos lugares, orgulloso de su estirpe”, destacó Teresa Parodi, a quién Damián conoció en Mendoza, el año pasado, en el marco de un homenaje a la cantautora.

Fue allí que ella escuchó a Damián y al armoniquista Marcelino Wendeler interpretar “El Fusilador”, una canción que Damián Lemes compuso para narrar la historia del fusilamiento de Ernesto Che Guevara, poniendo foco en quién debió ejecutar el disparo. “Antes de cantarla, miré a un lado de bambalinas y allí estaba ella esperando con su guitarra”, recuerda Damián.

Además, “desde la producción propusieron hacer algo juntos y en camarines, un rato antes, armamos una versión de El cielo del albañil, sumando a Polo Martí en guitarra. Cantamos juntos y fue muy emocionante”.

La semana siguiente a ese primer encuentro, Damián inició su gira por Europa y a su regreso comenzó a soñar con “Guarango” y con la posibilidad de que Teresa participe: “La contacto telefónicamente para invitarla a grabar conmigo la canción Guardamemoria y ella acepta y me invita a grabar en su nuevo disco, pero la pandemia frenó indefinidamente a idea de juntarnos. Así que, momentáneamente, la invitación trocó en un hermoso prólogo que antecede el disco”.

¡Guarango!

“Guarango es una palabra que de entrada incomoda ya que está acuñada como un adjetivo peyorativo y discriminador”, observó Damián Lemes en diálogo con Mirador Entre Ríos, y seguidamente aclaró que “en realidad es un gentilicio, guarangos somos todos quienes habitamos la extensa Región del Guarán, el litoral y también se le lama guarango al que habla en guaraní. En las grandes ciudades, y en un juicio apresurado de valor, empezaron a forjar este significado despectivo en el momento mismo en que estos hombres y mujeres soltaban su voz”.

“En este disco, a través de una palabra, intento reivindicar a la flora y fauna avasallada, a las costumbres, los oficios, la musicalidad y la palabra de estos hombres y mujeres que la región moldeó sabia y pacientemente. Verde profundo, tradición en movimiento”, agregó.

Fue grabado durante 2020 y lo componen doce canciones entre las cuales siete son letra y música de Damián Lemes. Las otras cinco son clásicos del cancionero del litoral: Chamamecito maceta y El cielo del albañil (T. Parodi y A. Tarragó Ros), Taipero poriahú (P. Roch y A. Tarragó Ros), A Villa Guillermina (G. Molina y R. Visconti Vallejos) y Gringa chaqueña (A. Ramírez y F. Luna). Antonio Tarragó Ros recita en dos de los temas.

Junto a Damián Lemes (voz y guitarra) participaron Milagros Caliva (bandoneón), Marcos Pereyra (coros y guitarra), Patricia Gómez (coros y recitado), Las Guitarras Gualeyas (guitarras y guitarrón), Paulina Lemes y María Cuevas (coros). Juampi Francisconi (percusión), Sebastián Martínez (percusión y coros), Santiago “Cuchi” Martínez (violín), Alejandro Della Penna (bajo y contrabajo), Marcelino Wendeler (armónica) y Sabrina Fantin (sapukay).

La mezcla y masterización estuvo a cargo de Martín Telenchanski y la gráfica estuvo a cargo de Juane Villagra (W-Estudio). El disco se editó por el sello ACQUA-Records.

Teresa Parodi: “Damián Lemes marca territorio”

Teresa Parodi dedicó unas palabras al cantautor entrerriano: “Desde el título “Guarango” este trabajo de Damián Lemes marca territorio. Su canto de agua clara, de agua intensa, trae, río abajo, con emoción genuina los saberes, los colores, las certezas del país natural al que pertenece con el corazón entero. Nos dice, en cada canción que integra este disco, de los oficios y las esperanzas y los dolores y los olvidos del habitante litoraleño “guarango” y definitivo como su raíz le manda.

Con esa palabra que deviene de “guaraní” y es usada en no pocas ocasiones para descalificar hirientemente al pueblo del Guarán que habita desde siempre esas regiones que legítimamente son su hábitat, su tierra sin mal, su reino en la tierra, Damián se define desde el vamos.

Se apodera de ese adjetivo peyorativo con precisión inocultable y le devuelve su dignidad de selva, su dignidad de grito, de baile, de sueños, de canto y en legítima defensa desde allí nos conmueve con su torrencial manera de ser voz de esa cultura nunca doblegada.

Con Antonio Tarragó Ros, referente indiscutido de la música de la región como invitado, cada rincón sonoro, cada detalle pensado desde la belleza fluye en este disco con que ahora sigue su huella de hombre de aquellos lugares, orgulloso de su estirpe.

Saludo con enorme placer este advenimiento por lo ya dicho y por las puertas que Damián con pasión y atrevimiento abre a las nuevas generaciones que por suerte ya han tomado la posta. Que este camino que con este trabajo traza sea luminoso y profundo como su arte”.