ALDANA BADANO
[email protected] ¡Ahijuna… Ña Miseria! es una producción del grupo de teatro “La Fosa”, escrita y dirigida por Julián Aquino. El espectáculo nuclea el uso de máscaras, música en vivo y la técnica del clown mezclando estas poéticas con el bello paisaje de nuestro escenario gauchesco. Se presentará en el sábado 4 de junio, por única vez, a partir de las 21, en el Centro Cultural La Hendija, ubicado en calle Gualeguaychú 171, de Paraná.
El grupo de San Justo (Santa Fe) se propuso jugar a partir de las imágenes de Molina Campos, de la literatura gauchesca de Güiraldes y el Fausto, de Goethe, imprimiendo su sello personal con una mirada lúdica, versionando los personajes y dándole lugar a la dramaturgia del actor como motor indispensable para crear un espectáculo que demuestre su sello particular.
Se trata de un espectáculo al cual puede acceder toda la familia, una comedia para reír y pensar por igual. Música, color, máscaras en una historia atrapante.
Julián Aquino, director de esta propuesta escénica mantuvo un diálogo con MIRADOR ENTRE RÍOS para contar más a cerca de la obra.
–¿Cómo y cuando surge el grupo de teatro “La Fosa”?
–El grupo de teatro “La Fosa” nace en el año 1986, con la Fundación del Banco Bica, a través de la participación de talleres de teatro y títeres. Entre el año 1986 y 1990 realizó diferentes producciones y ha participado en festivales y encuentros de teatro. Entre 1990 y 1992, el grupo recibe formación de pedagogía y didáctica teatral.
El Club Social Cosmopolita da en comodato al Grupo “La Fosa” la sala de teatro para el desarrollo de las actividades artísticas y culturales, desde allí el grupo desarrolla dos aspectos: la producción teatral, la formación y la circulación de espectáculos.
Hoy en día, el grupo cuenta con otros dos espectáculos además de ¡Ahijuna... La Miseria! Se trata de “El cuadro filodramático” de Jorge Ricci y “Viaje a Songoroboche” de Lucas Ranzani.
–¿Quiénes conforman “La Fosa”?
–Al grupo lo conforman gente que ama la actividad. Además de hacer y producir teatro somos trabajadores de otros sectores. Una parte de nosotros ha estudiado la carrera del profesorado de teatro y la tecnicatura. Otros se han formado informalmente en diferentes talleres y con distintos referentes de teatro local, provincial y nacional. Nos reunimos porque el teatro nos hace bien, nos da vida. Trabajamos con sentido profesional sin perder la frescura de un grupo del interior. Nos moviliza para llegar a más corazones y más cabezas. Tocar con la vara mágica del teatro a cuántas personas podamos.
–¿Cómo han sido tus experiencias dirigiendo, particularmente esta obra?
Al grupo me sumé en 2019. Fue invitado a dirigir. Una experiencia que ha sido enriquecedora, gratificante y desafiante. Si bien me desempeño como docente en escuelas y en talleres propios, donde los procesos de se dan de otra forma, lo considero como mi primer trabajo con el título de director, con una exigencia distinta. En los otros espacios donde trabajo, al finalizar los ciclos siempre presentamos obras, pero ahí el rol que ejerzo es más como un coordinador que un director.
Cuando me convocaron me encuentro con un grupo deseoso y con tantas ideas, demasiadas. Tuve que procesar todo, y pensar cómo íbamos a iniciar. Encontrar cual es el camino sin perder mi identidad como hacedor. Es hermoso trabajar con la fosa porque siempre están atentos, activos, proponen y respetan. Nos divertimos mucho en el armado y en todos los ensayos.
El proceso de armado del espectáculo ha sido atravesado por el contexto pandémico, lo que nos ha empujado a trabajar de otra forma, a ser pacientes y salir airosos. Había tantas ideas: teatro dentro del teatro, máscaras, clown, relatores, música, danza… Como grupo nos proponemos jugar y de ese juego sincero, espontáneo y reglado fue tomando color esta propuesta escénica.
–¿Qué características destacarías de la dramaturgia de “¡Ahijuna… Ña Miseria!”?
–El espectáculo que estamos presentando es una síntesis poética de varias obras y relatos acerca de cómo la miseria llega al mundo (“El herrero y la muerte”, “El pescador Juan Miseria”, “El Fausto de Goethe”, “etc.). La historia se enmarca dentro de la literatura gauchesca porque encuentra sus orígenes ahí, sin embargo, el tratamiento de la propuesta escénica posee elementos del teatro de máscaras, de la comedia del arte y del clown.
Conviven la imagen del campo, de sus personajes y sus colores con una impronta “actualizada”. La dramaturgia del actor ha sido otro de los puntos de partida, para fortalecer al relato teatral de la sustancia viva del actor.
Un elemento relevante a considerar es que, en esta anécdota particular, que decidimos contar, las figuras principales que son personajes masculinos por excelencia, como Miseria, Nuestro señor y Satanás “viran” para darle lugar al rol femenino en la actuación y en la historia en particular. Ya no es más Miseria el gaucho, sino una vieja paisana y ladina “La Miseria”, La figura de los cielos, es Nuestra Señora, con una doble actitud: Pacata y Liberal, y un satanás matrero, símbolo de toda nuestra cultura folclórica.
Pensar este cambio, surge a partir no sólo de que el elenco está compuesto en su mayoría por mujeres sino también descentrar los relatos de la figura del hombre y cuestionar de esta manera la historia y las historias.
FICHA TÉCNICA
Elenco:
Abad, María José
Cabrera, Nazareth
Gómez, Ramiro
Prono, Georgina
Ramírez, Jorge
Riboldi, Marcelo
Villalba, Griselda
Dramaturgia y Dirección: Aquino, Julián.
Asistencia de dirección: Strottmann Kröhling, Paula
Dirección de Arte: Rolón, Yamila.
Músico: Gómez, Ramiro
Vestuario: Busulari, Mónica
Máscaras: Briggiler, Alejandro
Fotografía: Laura Lovino
Diseño gráfico: Carmela Escandell
Contacto Facebook: https://www.facebook.com/teatro.cosmopolita/
Instagram: https://instagram.com/lafosateatro?utm_medium=copy_link
Reserva de entradas: 343 5 024599 (Claudia Zaragoza)
