Incertidumbre en un país incierto. Al contrario de otras elecciones presidenciales en Argentina, ésta, la 10ª desde el retorno de las urnas, trae consigo un grado de inquietud y desconocimiento frente a la aparición de un protagonista con promesas muy distintas y disruptivas en relación a lo que sucedió desde 1983 hasta hoy. En estos 40 años habíamos escuchado discursos cautivantes, pero no uno tan distinto y enfrentado con la clase política. Javier Milei (La Libertad avanza) promete una situación distinta. En la vereda opuesta están los otros dos grandes candidatos a ocupar la Casa Rosada: Sergio Massa (Unión por la patria) y Patricia Bullrich (Juntos por el cambio). Ambos son dirigentes políticos con un recorrido extenso y conocido.
La parte más sensible de la política en nuestro país es la economía. Y en especial la cuestión inflacionaria y la paridad con el dólar estadounidense, un referente cambiario en el mundo. Dos expertos hablaron con Mirador Provincial sobre este tema.
Alejandro Bonalumi es un reconocido periodista especializado en economía. Sobre los tres escenarios macroeconómicos posibles, comentó: “Creo que hay más de tres opciones. Después hay un escenario de ballotage y dentro del ballotage, qué ballotage. Es todo una gran caja de Pandora. La macroeconomía, que hoy está muy expectante, que hoy está todo demasiado sensible teme un triunfo de Milei en primera vuelta”. Bonalumi explicó los miedos de los actores económicos: “Primero por su plan, segundo por si políticamente hablando es viable implementar con la debilidad que él va a tener, con el congreso, sin gobernadores, etcétera. Y tercero que para diciembre faltaría una eternidad. Todo lo que puede pasar en una transición con Milei electo, con un gobierno (de Alberto Fernández) sin poder y sin expectativa”. La cuestión sería bien distinta de ganar el ministro de Economía de la Nación actual: “Hay otro escenario donde lógicamente, si Massa es el triunfador, (el plan es) hacer la plancha en el mismo escenario que tenemos hoy hasta diciembre que él asuma. Y ahí empezar a tomar quizás otro tipo de decisiones”. Sobre el caso de que Patricia Bullrich gane, afirmó: “Para el mercado y para la macro el mejor escenario es un triunfo de Bullrich y (Carlos) Melconián (propuesto como posible ministro de Economía argentino). Hablo de mercados y de macroeconomía, que no tiene mucho que ver con lo que le puede servir a la gente. Después la gente común tiene distintos escenarios propios”.
Sobre un hipotético triunfo del candidato libertario, el experto agregó: “Vislumbro un inicio de acomodar esa macroeconomía que tiene que ver con el déficit. No va a venir una dolarización de golpe. Tampoco va a poder quitar las retenciones tradicionales. Que el campo no espere una modificación violenta en su escenario”. Sobre nuestra provincia, Bonalumi dijo: “Por más que Milei se sienta todopoderoso va a necesitar charlas con (Maximiliano) Pullaro (gobernador electo). Y va a necesitar ordenar con Pullaro el tema de la inseguridad y los fondos propios y nacionales. Milei no va a poder mirar para otro lado en ese sentido”. “Un Milei en el gobierno no va a hacer cambios bruscos, pero sí los tiempos van a ser muy distintos (más lentos) a los de la política tradicional”, agregó.
Con respecto a las otras dos opciones, el periodista aseveró: “Con Massa presidente sería muy parecido a lo que estamos viviendo. La política tradicional se va a seguir manejando de la misma manera. Lo mismo diría de Bullrich. Esto lo dividiría entre lo que tiene que ver con la política tradicional y la anti política que ahí veo los tiempos mucho más ralentizados”.
Por su parte, el economista y profesor universitario Daniel Guida también dio su opinión. En caso de que Javier Milei gane en las elecciones, afirmó que avizora una situación de suma incertidumbre. “Gran parte de las propuestas que está haciendo Milei son prácticamente imposibles de llevar a cabo ni en el corto, ni en el mediano plazo. Muchas presentan ribetes de fantasía. Desde la propuesta de dolarización hasta la propuesta de eliminación del Banco Central (de la República Argentina) pasando por las propuestas de ajustes al déficit que son relativamente fantasiosas”, dijo Guida. “Es difícil pronosticar qué ocurriría con las variables macroeconómicas principales. Ni hablar con el valor de la moneda”, consignó el docente. “Plantear cortar relaciones con Brasil y China ya significa una incertidumbre absoluta y una pérdida muy importante en el campo económico, y de las relaciones internacionales”, criticó. “Es un anarcocapitalista. El mundo moderno está lejos de los anarcocapitalistas”, opinó.
Daniel Guida también planteó objeciones a los planes de la alianza que lidera Patricia Bullrich: “Ya conocemos la plataforma del Pro. Hemos tenido su experiencia de cuatro años y conocemos sus funcionarios. No hay nada nuevo en la propuesta. Entiendo que sería una cosa previsible. Cuesta pensar que un nuevo gobierno con esa dirección política pudiera hacer cosas opuestas”.
Con respecto a una victoria oficialista, el economista sostuvo: “Sería muy difícil también. El gobierno en que Massa participa es un gobierno con un sinnúmero de fallas y de errores tremendo. Ha tenido algunas cosas buenas y otras cosas no tan buenas. Un gobierno de Massa no podría ni debería ser la continuidad del gobierno actual. Habría más certidumbre en cuanto a las grandes líneas”.
Cómo se derrota a la inflación
Daniel Guida también habló sobre la inflación. Un mal endémico en Argentina. Sobre esta cuestión central, el experto dijo: “Es un fenómeno muy complejo que no reconoce una sola causa. La inflación es la resultante de causas que son más profundas. Es mucho más complejo que pensar que es solamente un problema de exceso de moneda o de déficit fiscal”. Para él se deberían realizar tres acciones fundamentales: superávit comercial externo, superávit primario y producción interna. “Primero hay que recuperar eso (saldo positivo con el extranjero) y hay que agregar los dólares que puedan venir por Vaca Muerta, por el gas, por el litio. Recomponer nuestro sistema exterior. Segundo, volver a tener superávit primario. La Argentina lo tuvo. No es difícil achicar el déficit. Hay que volver al equilibrio de ingresos y gastos. Y lo tercero es la vuelta a la producción interna, al desarrollo de un mercado sólido que nos permita tener superávits gemelos”, explicó Guida.