Apasionado del triatlón y la actividad física, Guillermo Tallano logró completar el extremo Iroman Full Florida, Estados Unidos. En poco más de 12 horas recorrió casi 230 kilómetros y finalizó entre los primeros 500 participantes de un total de más de 1.500 de todo el mundo. “Todos tenemos objetivos, tratamos de que la vara sea lo más alta posible. Al no participar nunca de una edición como esta me puse como meta inicial terminarla”, le dijo recién llegado de Norteamérica el oriundo de la ciudad de Sastre, cabecera del departamento San Martín, a este medio.
Fue una distancia total de 3,8 kilómetros nadando sobre el mar, 180 en bicicleta y otros 42 corriendo los que debió transitar Tallano para completar el Ironman Full Florida. Y la marca no fue menor: 12 horas 8 minutos y 59 segundos. Al sastrense le valió el puesto 81 en la categoría 40-44 años de un total de 219 participantes. Mientras tanto, en la clasificación general masculina terminó en el lugar 548 entre 1.511 competidores. “Fue un buen tiempo. Uno prepara la carrera, el tiempo es un poco anecdótico. Si bien al finalizar la competencia se observa la posición, la marca y tiene ciertos parámetros donde uno se quiere mover, el objetivo termina siendo concluir el recorrido total”, destacó.
Para el amante del triatlón fue la primera competencia de este estilo. Es que si bien ya había participado de varios Ironman, el Full era una cuenta pendiente. Y sobre todo porque cuando lo intentó, el ambiente jugó una mala pasada. “Fue una carrera rápida porque Florida tiene la característica de ser un lugar plano. Hay muchos otros lugares donde hay montaña, por ejemplo. Hace un tiempo había realizado la misma modalidad en Mar del Plata, un lugar donde hay muchísimo viento y el mar no es muy amigable. Sin embargo, el agua estaba en 12 grados. Desde la organización decidieron acortar el circuito de nado porque había ciertos parámetros de la temperatura que no resultaban seguros. Con lo cual, en realidad, esta carrera fue la primera con las distancias completas”, recordó.
La preparación, fuerza de voluntad
Sólo los apasionados de esta clase de competencia tienen la fuerza de voluntad para prepararse física y mentalmente en la previa. Constancia y buena alimentación son dos claves fundamentales para llegar en condiciones a la meta final. “Me preparé durante seis meses. Fueron entrenamientos de seis días a la semana, inicialmente de una hora y que se fueron incrementando con el correr del tiempo. Los fines de semana vienen los problemas, porque ahí la carga es mayor y la ejercitación es de cuatro horas los días sábados. El último mes, pasa a ser de siete, con lo cual hay que levantarse bien temprano. Y al día siguiente, el domingo, se reduce a tres horas y media”, relató el maratonista dejando en claro que la perseverancia es fundamental.
Otra clave es la alimentación. El alcohol queda de lado durante los últimos meses, y un buen plan nutricional se transforma en aliado del cuerpo. Es que cada entrenamiento consume una gran cantidad de calorías y cada comida pasa a ser un amigo indispensable. “Es una competencia que demanda mucho desgaste”, aclaró Tallano y agregó: “Es muy importante, durante la carrera, consumir carbohidratos cada una hora. Además existen otras cuestiones a tener en cuenta como las sales, de acuerdo al calor que haga en ese momento. Hoy vienen geles preparados que uno puede consumir en medio de la competencia y aportan todo lo que el cuerpo necesita”, indicó.
Por último, consideró que la mejor preparación mental se hace en esos fondos extremos de sábado, cuando los entrenamientos se transforman en eternos y la soledad desespera. “Al llegar el día de la carrera uno está entusiasmado, hay mucha gente por todos lados, voluntarios que ayudan, gente que corre al lado. Cuando uno está en la largada tiene todo ordenado. Lo podemos asemejar con un examen: te preparas durante un tiempo y una vez que llegaste al aula sabes lo que tener que hacer”, concluyó.