Con 25 años de historia, Sig Ragga es un ente compuesto por Gustavo «Tavo» Cortés (voz, teclados), Ricardo «Pepo» Cortés (batería, coros), Juanjo Casals (bajo) y Nicolás González (guitarra, coros). Es una caracterización que invita a jugar en un nuevo paisaje: el de la distorsión de la percepción del lugar común que tiene el ser humano de la realidad.

Su primer álbum, homónimo, fue producido por Diego Blanco (Los Pericos) y obtuvo una nominación al Latin Grammy 2010 en el rubro de “Mejor canción alternativa”. Su siguiente obra se tituló “Aquelarre”. Fue grabado y producido en Estados Unidos por Eduardo Bergallo (Soda Stereo, Gustavo Cerati, Shakira), y recibió tres nominaciones a los Latin Grammy 2013 en los rubros: “Mejor canción alternativa” y “Mejor álbum alternativo”.

En 2016, Sig Ragga editó su tercera placa discográfica, “La Promesa de Tamar”, grabada y mezclada por Eduardo Bergallo junto al grupo, y presentada oficialmente a sala llena en el Teatro Ópera de Capital Federal. Este álbum obtuvo tres nominaciones a los Latin Grammy: “Ángeles y serafines” (2016), y “Antonia” (2017), en el rubro “Mejor canción alternativa”, y al disco como “Mejor álbum de música alternativa” (2017).

Además, el 16 de noviembre de 2017 la banda tuvo la oportunidad de tocar en vivo la canción “Antonia” en la premiere de los Latin Grammy, que se realizó en Las Vegas, presentación que fue transmitida online para todo el mundo. Con estas distinciones, Sig Ragga sumó su séptima nominación en los premios de la academia, a lo largo de los tres discos de la banda. También fueron nominados por primera vez a los Premios Gardel.

A lo largo de más de veinte años de trayectoria, el grupo ha recorrido importantes escenarios nacionales (Pepsi Music, Personal Fest, Cosquín Rock y Lollapalooza) e internacionales (FIA en Costa Rica, Cortocircuito en Colombia y Siempre Vivo Reggae en Chile). De gira por Colombia, Sig Ragga tuvo destacadas actuaciones en el Festival de Músicas del Sur «Los países de Sudamérica unidos por la paz» y el cierre del MIC SUR 2016. En julio de 2017, la banda regresó a Bogotá (Colombia), para participar del Festival Rock Al Parque, donde se presentó antes más de veinte mil personas. Además, en el marco de la presentación del último álbum, el grupo llevó su música a Buenos Aires (CABA, La Plata, Tandil, San Miguel) y a las ciudades de Córdoba, Río Cuarto, Santa Fe, Mendoza, Paraná, Salta, San Miguel de Tucumán, San Juan, Chaco y Neuquén.

Mirador Provincial charló con Gustavo Cortés (compositor, voz y teclados) sobre los inicios de Sig Ragga y del espectáculo que darán este sábado 21 de septiembre JAGUAR HAÜS | Rodríguez 198 bis (Rosario)

- ¿Cómo surge Sig Ragga?

-Sig Ragga surge fundamental como un grupo de amigos primero… y al poco tiempo como familia. Empezamos a tocar primero con Nico, que nos conocíamos de la secundaria, y otro amigo, Iván… y al poco tiempo se suma mi hermano, Pepo. Ahí fue cuando Nico empieza a tocar la guitarra en la banda, porque tocó la batería en un momento. Entonces recién cuando llega el primer bajista, en cuando Pepo pasa a la batería y se forma Sig Ragga. Fundamentalmente, nace como un grupo de amigos. 

- ¿Cómo es el proceso compositivo de cada tema, la fusión de los sonidos?

-El proceso compositivo de cada tema es muy distinto. Quizás algunas cosas se repiten en el sentido de que vamos aprendiendo de los errores, o cambiando esa forma en la búsqueda misma de la canción. Van modificándose las partes y las formas de crear las canciones, muchas veces nace de una secuencia de acordes, de la parte armónica, ahí nomás con una melodía… a veces nace de un ritmo, por eso decimos que va cambiando de canción en canción.

Muchas veces surgen canciones de ideas más abstractas, con referencias de otras canciones, estilos o energías… de artistas que nos gustan o admiramos… en definitiva, puede surgir de muchas maneras. También puede ser en una zapada… pero en lo general suele ocurrir eso, empezamos con una secuencia de acordes, la armonía, la melodía… es como muy importante para nosotros. Y después vamos agregando capas, vamos orquestando, puliendo… quitando lo que sobra… cada canción tiene su proceso.

-27 años de trayectoria... ¿cuál es la fórmula?

-Ya estamos más cerca de los 27 años en realidad… sinceramente no sé cuál es la fórmula, es una pregunta que yo me hago también. La verdad es que no sé cómo hicimos… puedo dar cuenta de mucho cuidado, de mucho cariño, mucho respecto… mucho priorizar nuestra amistad, nos queremos mucho y hemos aprendido a comunicarnos. Lo fundamental es que tenemos mucho diálogo, entonces cuando alguno se ha sentido herido o molesto con algo, o si algo teníamos que cambiar, siempre fuimos de hablar en buenos términos. Por supuesto hemos tenido algunas discusiones más subidas de tono, pero fueron las menos, como en toda familia.

Sinceramente, es eso: mucho cuidado del otro, cuidado del equipo, nos contenemos, nos queremos mucho. Seguimos aprendiendo todo el tiempo sobre el bienestar grupal y el individual. Cuando uno anda más flojo que otro nos ayudamos, nos sostenemos. Somos muy compañeros.

- ¿Hay un tiempo de introspección y detenimiento?

-Sí, eso de detenernos y hacer introspección es algo constante, somos de reflexionar mucho sobre lo que vamos haciendo, y lo que hicimos, pero siempre para adelante… como pensando en lo que debemos cambiar para mejorar y salir para adelante. Y claro que también tenemos muchos momentos de detenernos: nos ha pasado de decir “paremos la pelota, no estamos para salir a tocar” o cosas así… “no es momento para hacer el disco, enfoquemos en otra cosa, hasta que no tengamos mejor la idea de qué haremos en el año… “y cosas así. Y también por las situaciones de cada uno en lo personal, somos de reflexionar todo el tiempo, sobre nuestros movimientos, acciones y qué hacer.

-Se percibe en el escenario una gran fuerza del teatro dramático polaco... ¿Cómo se desarrolla la escenografía?

-El hecho de que se perciba la influencia polaca es porque nos encanta el arte polaco. Viene de mi familia también: a mi madre le gustaba mucho el arte polaco, ella era artista plástica, asique claramente y de alguna manera se está expresando. Hay artistas polacos y rusos también que nos gustan mucho, muchas referencias. La parte pictórica y fotográfica. Y hay un director de teatro, que hacía la clase muerta, que no recuerdo el nombre, pero era un genio polaco… que nos encanta también… asique sí, seguramente todo eso se está reflejando en nuestras canciones.

La escenografía se desarrolla como la música. Si bien no hay tanto trabajo escenográfico porque nuestra puesta en escena está más enfocada en nosotros, en nuestros cuerpos, el trabajo está más puesto en nosotros, en el maquillaje y el vestuario. Y las luces están ahí trabajando en función de ese juego de sombras de esos personajes y en ir acompañando y reforzando esas atmosferas y los contrastes que puedan suceder con la música. Todo eso se construye también con mate de por medio y tiramos ideas, y las vamos cambiando todo el tiempo. Toda nuestra escena fue cambiando… cómo llegamos a los personajes plateados de hoy… es muy largo, pero es básicamente eso: nos juntamos y conversamos con qué jugar. Es un juego fundamentalmente.

- ¿Cómo ven la escena cultural en Argentina?

-Personalmente vivo dentro de un cofre, me pierdo mucho de la actualidad, de la escena musical argentina, el main stream como le llaman, lo que más se conoce o vende, lo que tiene más bombardeo en medios… a mí no me identifica y no me gusta mucho lo que está sucediendo en ese circuito particular. Pero eso no significa que toda la escena musical o cultural, sea eso… sino más bien un recorte preciso que tiene que ver más con el entretenimiento y la venta. De todo eso, lo que más llegada tiene o está más presente en los medios y en lo publicitario, lo veo cada vez más pobre a nivel recursos estilísticos, a nivel de ritmo, armonías, buenas letras, lo veo que cada vez peor, más degradado… siempre hablando de ese circuito más main stream. Ahora, en este mismo momento, como siempre ocurrió, hay artistas impresionantes que nos vuelan la cabeza, y que nos renuevan las esperanzas que nos enriquecen muchísimo y de los cuales aprendemos mucho. Probablemente mucha gente no los conoce, y se mueven en circuitos más under, pero están ahí.

- ¿Dónde radica la identidad de Sig Ragga?

-Qué pregunta difícil dónde radica la identidad de la banda. Si pudiera responderlo … la verdad es que la identidad es casi una ficción también… son como retazos de distintas cosas… en lo personal entiendo que hay cosas de nuestra identidad que son más de los estilístico, del modo en que hacemos las cosas, ahí se juega nuestra identidad… o lo que comúnmente llamamos original. Pero a la vez nada es absolutamente original, en lo absoluto… “de la nada nada sale” …pero hay una identidad fuerte del propio territorio de donde venimos, de Santa Fe por supuesto. La identidad se fue forjando con toda la gente que hemos conocido, las experiencias que vamos teniendo. De todas formas, yo no lo veo como algo estático, como diciendo somos esto. En ese punto es donde digo que es una ficción, la identidad está en continuo movimiento por más que uno quiera cristalizar o definir… quizá también sea algo que vamos buscando todo el tiempo: ¿Quién es uno? ¿Quiénes somos? Es una pregunta que quizás no tiene una respuesta para siempre.

- ¿Cómo entienden el poder de la música y la creación artística?

-En primer lugar, en lo personal me pasa por el cuerpo, tiene este poder de emocionar, es algo que impacta en el cuerpo, con las emociones y es muy poderoso eso. Ahora también hay que alejarse de estas concepciones romantizadas del arte como un lugar solemne… para cambiar el mundo… no creo que sea tan así. Sí es importantísimo y de hecho en mi vida lo es, pero tampoco se lo voy a chantar a todas las personas en el mundo que tienen otra relación con el arte, o con la creatividad que quizás las tienen plasmada en otras cosas…. La creatividad también atraviesa distintas esferas, ámbitos y marcos de acción. Hay que ser creativos por ejemplo para manejar una situación de crisis, para manejar el estrés en el trabajo, para mantener una relación de una manera virtuoso, hay que ser creativo para cocinar… un montón de cosas, ¿no? La música es muy poderosa pero también yo lo tengo muy lo llano, a mi relación… con los pies en la tierra, no sintiendo que es una cosa que me da cierta superioridad por el resto de la gente por el hecho de dedicarme al arte, no, en lo absoluto no es así. Ante todo, soy un trabajador, lo veo como un oficio, como algo que se va trabajando y puliendo y se va mejorando… pero claramente no le quito importante al arte, a los discursos artísticos en lo general, creo que son como ese inconsciente colectivo, esa cosa que no vemos pero que de algún modo está pujando en la transformación de las personas, de un sinfín de maneras.

Maneras que no podemos ni controlar ni dar cuenta quizás. Llevándolo por ahí a un análisis más preciso, hay que hacer un recorte más chico: en un contexto histórico, en una situación, en un ámbito más chico…