Con preocupación y asombro por lo que calificó como una situación “grave y llamativa”, el juez penal de Reconquista, Dr. Santiago Banegas, expuso la realidad que atraviesa la justicia de Menores de la ciudad de Santa Fe, que también lo afecta directamente en lo particular.

El magistrado relató, primeramente y para contextualizar su reclamo, que el Juzgado de Menores Nº 2 de Santa Fe tenía un juez que era el Dr. Estanislao Surraco, que ganó en 2018 el concurso para juez de Menores de Rosario: “Él es de esa ciudad, se fue en diciembre de ese año a cubrir el juzgado de Rosario, y a partir de ese entonces el juzgado de Santa Fe no tiene juez”.

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Es decir, enlazó, que de los dos juzgados de Menores que hay en la ciudad de Santa Fe “uno está sin juez desde hace tres años, con el agravante que los juzgados de Menores trabajan en tándem, un juez hace la instrucción y otro juez la parte del juicio, es el que dicta sentencia”. Entonces, al no haber un juez es como que “habría medio juzgado en funcionamiento. Si bien hay un juez en el Juzgado Nº 1, al faltar el otro juez es como que hubiera medio Juzgado de Menores en funcionamiento, con todo lo que ello implica”, puntualizó.

Para el Dr. Banegas la situación es “grave” porque, además, implica una recarga en los jueces penales que tienen que cubrir el Juzgado de Menores, con “el agravante también de que los jueces penales no tienen especialidad en menores”.

En cuanto al terreno legal y técnico, referenció que tanto la ley, como la Convención de los Derechos del Niño, como la Corte Interamericana y la Corte Suprema de Justicia, en distintos fallos, exigen que las vacantes en los juzgados de Menores o Juveniles sean ocupadas por especialistas en esa materia, porque “tiene la justicia penal juvenil particularidades que necesitan especialidad por parte de los jueces, incluso de los secretarios, de los empleados, y hoy esa situación no ocurre en la ciudad de Santa Fe”.

Asambleas legislativas
Con relación al concurso, dijo que está concluido desde hace más de seis meses, en julio del año pasado ya se publicó el orden de mérito: “En lo personal estoy al tanto porque quedé primero”.

En esa línea, citó que el 18 de julio del año pasado se publicó el orden de mérito de este concurso, en el cual obtuvo el primer lugar y, a partir de ahí, hubo dos asambleas legislativas donde el Legislativo trata los pliegos que el Ejecutivo remite. “En ninguna de esas dos asambleas, pese a que se cubrieron más de 80 cargos entre jueces, fiscales y defensores, más cargos de entes públicos, curiosamente el cargo de juez de Menores de Santa Fe que se necesita con urgencia no fue cubierto, lo cual llama poderosamente la atención”, apuntó.

“Lo que me pasa a mí en particular, como nunca he tenido relación política con nadie, no tengo forma de saber qué pasa, más allá de llamados al Consejo de la Magistratura que me informó que su función ya cesó”, lo cual es lógico porque ya elevó la propuesta en julio de 2021, manifestó.

Enseguida, agregó que “lo que queda es simplemente remitir el pliego, que sinceramente no sé por qué no se remite. El motivo de la demora es desconocido para mí, como creo que lo debe para los jueces penales que se están haciendo cargo de cubrir un juzgado que no es de ellos y en el cual no tienen especialidad”.

“Vacante insólita”
A esa altura de sus declaraciones, indicó que “para mayor curiosidad todavía, la abogada que ganó el concurso para Rafaela, en el mismo concurso, pudo asumir el cargo porque el juzgado de ese ciudad sí se cubrió, lo que lleva a que Rafaela tenga dos jueces de Menores con una población cinco veces menor que la de Santa Fe, y que la capital provincial tenga solo un juez de Menores, siendo esto bastante grave y llamativo”.

Insistió en que “más allá de mi preocupación personal, porque si concursé ese cargo tengo intenciones de volver a Santa Fe que es mi ciudad natal, hay una cuestión ya mucho más seria que es la institucional y que es que miles de víctimas e imputados no reciben ningún tipo de respuesta por esta vacante insólita porque ya está concluido el concurso hace meses”.

El Dr. Banegas, para concluir, dejó un dato abrumador para los tiempos de inseguridad que se viven: “En lo que hace a niñez, a menores en conflicto con la ley penal, se requiere un tratamiento urgente, casi inmediato, cuando ocurre el hecho porque puede determinar, si se trata o no esa situación, que el menor puede reencauzar su vida o no. Entonces, dejar que pasen cuatro o cinco años sin hacer nada con adolescentes en conflicto con la ley penal trae consecuencias gravísimas para ellos cuando llegan a la adultez, por lo tanto, llama la atención que no se esté cubriendo esta vacante”.

Consecuencias
¿Cuáles son las consecuencias que acarrea esta demora?, preguntó Mirador Provincial. “Esto implica que haya causas que llevan años sin tratarse, que solo se estén dando trámite a causas con detenidos o causas de mayor repercusión social, pero un montón de otros casos que ingresan a los juzgados de Menores no pueden ser tratados, o no al menos como correspondería”, respondió el funcionario judicial, sin medias tintas, revelando una problemática mayúscula.