Este viernes 17 de marzo, un grupo de jóvenes, aparentemente menores de edad, ingresó en una casa ubicada en Villa Adela, en Concordia. Montados a caballo y armados pretendieron robar, pero los dueños salieron y los “jinetes” huyeron, no sin antes disparar varios tiros con un arma tipo 9 mm que llevaban.
El video del momento circula en las redes sociales. En las primeras imágenes se nota la excitación de perros que ladran, anticipándose a lo que sucedería: cuatro sujetos en tres caballos abren como si nada el portón de la casa e ingresan. Lo hacen con tal naturalidad que bien podría suponerse que son los dueños, o los cuidadores. Pero no es así.
Todo transcurre en aparente tranquilidad hasta que se escuchan los primeros balazos y se ve a los ladrones huyendo al tiempo que gatillan sus revólveres. El enfrentamiento fue con los dueños de la casa, quienes resistieron el asalto.
La última imagen de la filmación permite observar el nerviosismo y el llanto de una mujer que sale de la vivienda.
Según trascendió luego, el botín no era alguna preciada joya como en el cine, o las cajas de seguridad de algún banco. Se trataba de un ternero que la familia cría en ese hogar.
Desde la Policía informaron que no hubo heridos y que, si bien la familia dice saber quiénes son los jóvenes, tampoco hay detenidos.
VECINOS PIDEN SEGURIDAD
Tras el robo llevado a cabo a caballo y a mano armada, los vecinos de Villa Adela se autoconvocaron para concentrarse este viernes a la noche, en la rotonda que enlaza Avenida Frondizi con la Presidente Perón, en una de las salidas de Concordia.
Villa Adela es una barriada históricamente tranquila, alejada del centro de la ciudad. Para quienes vienen a la capital del citrus desde el sur, desde Buenos Aires o también desde Paraná, el barrio queda de paso, ya que se lo atraviesa gracias a una amplia avenida, con colectora incluida.
Lo vivido en los primeros minutos de este viernes sería la gota que ha desbordado el vaso de la paciencia. La preocupación por la inseguridad ha venido creciendo de la mano de numerosos hechos, como dos robos en dos días en el Club San Lorenzo, representante de la zona en el fútbol concordiense.