Ni el más optimista de los canallas hubiese imaginado este final después de haber tocado fondo en el 2022. Mirando de reojo la tabla de los promedios, Central se hizo gigante en su estadio y construyó una temporada fantástica. Clasificado a la Copa Libertadores 2024, ahora el sueño del pueblo auriazul es pisar fuerte en el continente y darle pelea a los “cucos” brasileros.

Es que los elencos de Brasil ganaron las últimas cinco ediciones del torneo más importante de esta parte del mapa y Central querrá ser el que corte esa hegemonía. Claro que para eso habrá que meter mano en un plantel campeón, sí, pero muy corto para encarar la triple competencia.

Hay que recordar que la Copa de la Liga empezará el 28 de enero y los de Russo querrán defender la corona de la mejor manera posible, mientras que la Libertadores dará el puntapié inicial en la zona de grupos en marzo.

La fase eliminatoria ya tuvo el sorteo realizado la semana pasada y es desde donde saldrán los último cuatro puestos para los bombos en la llave de grupos. Central se ubicó en el bombo 3 junto a sus compatriotas San Lorenzo y Talleres, The Strongest de Bolivia, Universitario de Perú, Deportivo Táchira de Venezuela, Alianza Lima de Perú y Millonarios de Colombia.

En tanto, los cabezas de serie serán Fluminense, Palmeiras, Flamengo, Gremio y San Pablo de Brasil, River, Peñarol de Uruguay y Liga de Quito de Ecuador. Además, en el bombo 2 se ubicarán Atlético Mineiro de Brasil, Barcelona e Independiente del Valle de Ecuador, Libertad y Cerro Porteño de Paraguay, Estudiantes de La Plata, Bolívar de Bolivia y Junior de Colombia.

Finalmente, en el copón 4 quedaron ubicados Caracas de Venezuela, Liverpool de Uruguay, Huachipato y Cobresal de Chile, más los cuatro ganadores de la fase previa.

El sorteo ideal para Central sería que del bombo 1 le toque Peñarol, sin dudas el rival más accesible de los cabezas de grupo, del segundo copón evitar la altura de Ecuador y Bolivia sería la clave, mientras que el tercer rival no aparece como alguien de temer, aunque tampoco hay que subestimar a nadie.

Claro que todas son suposiciones y los de Arroyito deberán dar su mejor versión para llegar a los octavos de final del certamen. A partir de agosto, una vez que concluya la Copa América de Estados Unidos, Ángel Di María volvería al club que lo vio nacer y la ilusión se multiplicará por decantación.

Con el hijo pródigo en el plantel, cualquier sueño parece posible, pero, para eso, en los primeros seis meses el cuerpo técnico de Russo y los jugadores deberán dar su máximo esfuerzo, tal cual sucedió en este cierre de año.

Desde la comisión directiva se aseguraron la continuidad de la columna vertebral: los dos zagueros Carlos Quintana y Facundo Mallo y los dos encargados de la ofensiva, Ignacio Malcorra y Jaminton Campaz.

En las últimas horas surgió una versión que ponía en duda la continuidad de Jorge Fatura Broun, ya que se le termina el contrato a fin de año. El arquero es buscado por Colón, Gimnasia La Plata y Racing, aunque la oferta que más le seduce es la de Brasil, con un contrato por dos años a cambio de dos millones de dólares. Broun dejó en claro que la prioridad la tiene Central ya que quiere jugar la Libertadores, pero la oferta de Brasil es tentadora, teniendo en cuenta su edad y que en el exterior solo jugó en Bulgaria, esta sería una buena manera de hacer una diferencia económica en los años finales de su carrera.

Sobre los nombres que pueden llegar, la dirigencia no se quiere apresurar ya que primero deberá evaluar las ofertas que seguramente llegarán por varios de los campeones. Central sabe que para competir con los grandes equipos de Sudamérica deberá potenciar lo que tiene y, llegado el momento, rodear y cuidar a Di María para que el Ángel de Arroyito también pueda lucirse como lo hizo con la celeste y blanca.