Silvia Simmone | [email protected]


Durante la tarde de este domingo se pudo ver sobre el río Uruguay al grupo de remadores que se convocaron para pedir por la pronta sanción de la ley de humedales en el país. Más de veinte embarcaciones partieron del puerto de la ciudad de Colón para llegar hasta la zona del Piedras Coloradas, para luego culminar el recorrido en cercanías de la Reserva Natural Rio de los Pájaros en zona norte.


En diálogo con Mirador Entre Ríos, Carlos Serratti, profesor e integrante de la Asamblea Ambiental Colón, explicó que la convocatoria se dio en el marco de las acciones que se realizan en varios puntos de país para que el gobierno considere la ley.


“Esto empezó a mediados del mes de agosto con una gran movida que se hizo desde Rosario, que es el epicentro de la lucha por los humedales, hacia Buenos Aires para entregar en el Congreso de la Nación un petitorio para el tratamiento de la ley. Lo que se percibió en líneas generales es que no había mucha voluntad para el tratamiento, entonces la idea es buscar nuevos recursos sociales como para poder visibilizar la lucha y lograr acciones que se asocien a cada territorio”, indicó.


En la ciudad de Colón la convocatoria estuvo acompañada por diferentes organizaciones, instituciones y grupos de personas que siguieron el recorrido por agua, por tierra y en el punto de encuentro, donde se juntaron firmas para el petitorio provincial de Emergencia Ambiental en Entre Ríos por el uso de agrotóxicos y por la protección de la Reserva Norte.

Humedales de Colón

La convocatoria realizada en la ciudad, hizo visible los sitios de importancia natural que existen en el departamento Colón y sobre el río Uruguay donde se encuentran cuatro grandes humedales que están relacionados directamente a las dinámicas del río.


“Sin hablar de los humedales que están por dentro, sobre el río Uruguay encontramos cuatro humedales que tienen diferentes problemáticas y que es necesario atenderlos para preservarlos. Está el humedal ´2 de Agosto` ubicado en la desembocadura del arroyo Caraballo que ya fue intervenido por la empresa Iberpapel Argentina al construir un terraplén que lo rodea para destinar el espacio interior a la agricultura. Esta el humedal de Arroyo Perucho Verne, el cual comprende una gran extensión hacia el oeste del rio Uruguay y sobre el cual ya se está trabajando para declararlo como reserva, porque además de las diferentes problemáticas asociadas al cultivo extensivo, peso sobre él un proyecto de barrio náutico, hay un astillero que está funcionando y una serie de intromisiones sobre lo que es el humedal, de las cuales se tiene poca información por lo que desconocemos si están acorde a los reglamentos vigentes para esa dinámica, porque las normas están, pero no se les hace caso. Por otro lado, está la Reserva Norte que es el humedal del arroyo Artalaz, y ya es una reserva pero con letra medio muerta, porque actualmente se sigue interviniendo y hay una serie de irregularidades que se están observando que tienen que ver con el no cumplimiento de la norma. Y también hay otro humedal grande que es el de Punta Durán, en cercanías del Puente Internacional que abarca la zona del bajo Puente Artigas”, detalló.

Por los humedales

Las distintas intervenciones que se realizan a nivel nacional por los humedales, piden que se de tratamiento en el congreso, a la ley de presupuestos mínimos sobre las acciones sobre los humedales. Si bien existe un dictamen favorable de la Comisión de Recursos Naturales de la Cámara de Diputados de la Nación para su tratamiento, es la tercera vez que el proyecto no llega al Congreso Nacional producto de los lobbies existentes vinculados con los sectores agrícolas e inmobiliarios.


“La problemática que se está desarrollando sobre los humedales ya es muy evidente. En algún momento puede haber estado mas oculta, pero hoy por hoy está siendo visibilizada porque se siguen quemando campos. En Entre Ríos tenemos focos constantes, en la zona de Misiones hubo fuegos prendidos durante la última semana, en zonas de Córdoba lo mismo. Si no son intereses inmobiliarios, son intereses agropecuarios, y también hay intereses que se desconoce sobre cuáles son sus orígenes. Pero la realidad es que se está avanzando muy fuertemente sobre los humedales, y junto con eso hay toda una dinámica de ocupación territorial que afecta a las comunidades, por eso se hace cada vez más visible”, reflexionó Serrati.