Ariel Gustavo Pennisi


De temáticas actuales y controversiales, la ficción Hijas de Hipnos tiene una historia de construcción constante, siendo portavoz de resistencia y lucha. Ficción que desnuda por medio de sus personajes las distintas matrices paradigmáticas que cimientan los discursos predominantes que históricamente han consolidado una cultura patriarcal, aquella por todos conocida desde la práctica, la omisión, la lucha o resistencia.

Aquella que somete a mujeres desde la violenta comodidad del hábito sin importar que sea madre, hermana, prima, abuela, tía de quien escribe o lea esta nota. En un universo atemporal, distópico quizás, los sucesivos feminicidios de trasfondo parecen ser el anclaje a un real que necesariamente necesita expresiones de lucha, resistencia y reflexión para deconstruirse.

Por historia, argumento, creatividad y narrativa, la obra escrita por Carolina Diez Zueta no deja de construirse y escribirse desde el año 2015 formando parte del histórico encuentro internacional de mujeres desarrollado en la ciudad de Rosario en el año 2016, en una época donde algunos derechos hoy conquistados todavía no tenían letra escrita.

Desde Mirador Provincial dialogamos con Carolina, la dueña de la pluma y una de sus protagonistas. Nos contó que la puesta en escena “aborda ciertos dilemas sobre el lugar de la mujer tanto en la realidad como en el imaginario” anclando la obra a “un correlato que tiene que ver con los feminicidios y la violencia, pero no solo de género sino la degeneración de la violencia” a su vez afirma que “no necesariamente es una obra dramática sino que tiene tintes de humor” (…) “ siendo una invitación a la reflexión desde la ironía acerca del lugar de la mujer en una sociedad que históricamente ha construido una cultura que la somete no solo por el género opuesto sino por sí misma”, tomando el humor como herramienta de denuncia y resistencia a aquellos motes expresivos de una cultura patriarcal que encuentra su cara más atroz en los sucesivos feminicidios.

No dejar de nacer
Hay un comienzo quizás inesperado en la génesis de la obra al cual Caro define como “accidente” o accidente devenido en “encargo”, ubicándolo temporalmente en el año 2015 para relatarnos la experiencia: “comencé a dar un taller de escritura creativo, más precisamente de laboratorio y por ese entonces venía trabajando como actriz con grupos independientes” (... ) “el director de uno de esos grupos venía investigando la temática del feminismo, había indagado sobre la figura de Maitena y viene a mí con una pila de papeles, con la intención certera e irrevocable de que yo lo escribiera, lo convirtiera en texto”. La cosas no fueron tan sencillas, la creatividad tiene sus altibajos “luego de una pulseada de voluntades en un bar, donde yo le explicaba que mi faceta creativa tenía que ceder a cuestiones más básicas de necesidades, Marcos Bernal (el director en cuestión) contrato mis servicios para comenzar este texto. A los cinco días eran unas seis páginas que aceptó muy bien, le gustó mucho para que continúe” (…) “yo estaba muy enojada con el texto que por supuesto estaba inconcluso” (…) “estaba pasando por una recuperación luego de un post operatorio largo y coincidió con que ya estaban ensayando parte de la obra. Marcos me insinuaba para que sea unas de las actrices que eran cuatro personajes y uno de esos personajes es la escritora de la historia que habla muchísimo” (...) “recuerdo haberle dicho que no soportaba el texto, que lo quería destruir, él me dio permiso para hacerlo completamente, incluso lo que representaba la investigación previa” lo cual no pasó y “de a poco se fue formando lo que es el texto actual, en aquel momento en el 2015 hicimos una presentación a fin de año en La Morada. El espacio se llenó. algunas personas quedaron afuera. Se realizó bajo la dirección de Bernal con la formación inicial, posteriormente se disuelve el grupo”.

En el año 2016, la puesta en escena encuentra un nuevo espacio de expresión y porque no de lucha. Fue en el Encuentro Internacional de Mujeres que se desarrolló en Rosario: “Yo tenía contacto con algunas personas que estaban en la organización del encuentro de mujeres que se hizo en Rosario en el 2016, una de las organizadoras me contacta, a raíz de eso me llamo a Carla Gordillo a quien conocía como actriz, es decir yo como público. Le pude mandar el texto a ella para que me dé su opinión, pero ya con la fecha del encuentro de mujeres aprobada. Es decir que así nos conocimos, haciendo la obra en octubre en la Facultad de Humanidades, con dos pre ensayos y algunas directivas de una compañera (Vicky Olgado). A partir de ese momento todas nuestras presentaciones fueron bastante activistas, autogestivas, en lugares que habían cargado con pasado de sufrimiento para las mujeres (ex prostíbulos, etc.). Es una obra breve, pero también mutante. Durante todos estos años nos autodirigimos por decirlo de alguna manera, Carla es actriz de oficio y profesora de teatro”.

El andar artístico no se detuvo aunque se vio afectado por la pandemia: “el 14 de marzo del 2020 una semana antes de la cuarentena, tuvimos una presentación en la Vigil, que fue la más formal” (…) “la función del jueves es por primera vez una función donde vamos a estar siendo dirigidas, lo que significa que el proyecto tomó otro carácter y relación. Hijas de Hipnos tiene la particularidad de haber nacido varias veces y recién ahora estamos en un momento de madurez, porque a veces el teatro por más que se estrene no necesariamente está terminado estando en continúa formación de alguna manera”(….) “a la vez los temas son tan actuales, en el 2015 había tabúes que hoy en día por suerte ya son más permeables en el discurso” (…) “en un principio la obra intentaba ser algo centrado en una figura luego paso a ser algo que me interpela a mí también como autora, escritora y mujer . Entonces hay referencias a la escritura y a ciertos estereotipos o variantes estereotípicas con las que están disponibles en el imaginario femenino, pero como también tiene algo de futurista, va un poco más allá de esas cosas”.

Un universo distópico con viejos nuevos temas
Dentro del texto narrativo de la obra, hay noticias que están tomadas de la realidad. Son casos verídicos de feminicidios que si bien preservan la privacidad al cambiarle la identidad, conforman una investigación paralela construyendo como dice su autora “un nivel de ficción si se quiere, que incluso es humorístico o melodramático” con un nivel de referencia concreta a la realidad escrita en un universo futurista o abstracto, con una invitación al espectador: “la idea es que si hay una protesta no se quede en una queja hacia el afuera, sino que los personajes y la autora misma se interpela y el personaje de su mente, imaginario irrumpe para interpelarla a su vez, pasando a ser la interpelación, la protagonista de alguna manera “ (...)“así se quiera ver a los dos personajes como dos caras de una misma persona o quizás un nivel más sutil, el inconsciente y los actos, la idea es que los diálogos se conviertan en algo más que una simple queja, abriendo preguntas más que construyendo repuestas. Yo nunca había escrito un texto dramatúrgico, vengo de letras, en ese momento solo escribía prosa y algo de poesía. Actualmente si estoy escribiendo textos dramatúrgicos, Hijas del Hipnos es mi primer Frankenstein para el teatro”.

Argumento
Una mujer encerrada reflexiona sobre la sociedad y la injusticia. La zorra irrumpe desde las profundidades de su ideal y comienza un diálogo entre ficción y realidad. Mientras una radio intermitente narra los casos de mujeres asesinadas. Ellas buscan en desvaríos, noticias y discursos prestadores de una verdad que las salve.

Contacto

[email protected]
Reservas: 341-7203448
Entradas: 1000tickets.com.ar

Ficha

Actrices: Carla Gordillo y Carolina Diez.
Dramaturgia: Carolina Diez.
Dirección: Natalia Camuso.
Duración: 40 minutos.
Función: Jueves 18 de noviembre, 20 horas.
Dirección: La Usina Social (Jujuy 2.844, Rosario).

Bio

Carla Gordillo: actriz, profesora de teatro, directora y productora cultural. Desde el año 2000 ha actuado en obras dirigidas por destacados directores de la ciudad de Rosario. En este momento, está a cargo del taller de teatro inicial y avanzados en la Biblioteca Popular C. C. Vigil. Actúa en las obras “De Amor y de Verso”, “Cuatro Gotas Locas”, “El Club Arte y Acción”, “Hijas de Hipnos” y lleva adelante desde hace ya 10 años el espectáculo de humor “Tupper sex el show”. Es una de las integrantes de la compañía Teatro de la Huella. En cuanto a su formación académica, ha cursado la carrera de actor nacional y el profesorado de teatro en la Escuela Provincial de Teatro y Títeres 5.029 de Rosario. Se ha formado con destacados docentes buscando afianzar su búsqueda en el trabajo de la voz, el cuerpo y la improvisación.

Carolina Diez Zueta: actriz, escritora y gestora cultural. Ha actuado en diversas producciones audiovisuales de la provincia de Santa Fe. Entre ellas, el largometraje “Manekineko”. Entre los años 2012 y 2014 formó parte del elenco de la serie televisiva “¿Quién mató al Bebe Uriarte?”, transmitida por la televisión pública. A su vez participó en diversos cortometrajes, mediometrajes y videos de las carreras de cine locales. En teatro cuenta con la actuación de obras como Trip (2012) o su reciente obra Hijas de Hipnos (desde el 2015 a la actualidad), siendo esta última su debut narrativo en la dramaturgia. Desde 2015 coordina el Laboratorio Creativo de escritura. Estudió letras en la Universidad Nacional de Rosario, es investigadora y participó de la gira circense de teatro infantil desde agosto de 2021.