Javkin pronunció su discurso de apertura de sesiones del Concejo con un acento marcado en la resolución del problema de la violencia armada que se vive en gran parte de la ciudad de Rosario. El presidente de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe, Daniel Erbetta, el fiscal general de Santa Fe, Jorge Baclini, el juez federal Aníbal Pineda y los senadores Dionisio Scarpin y Carolina Losada fueron algunos de los funcionarios que se acercaron a escuchar la palabra del intendente.
El mandatario local mostró en su discurso un mapa de la República Argentina con las cinco cárceles desde donde se envían las órdenes para cometer ejecuciones. Hay uno en Coronda, otro en Piñero, dos en el AMBA y el restante en Rawson, Chubut. “Estos son los penales en donde están concentrados los delincuentes de extrema peligrosidad en la Argentina. No son tantos. Pongan inhibidores de señal y control estricto de las comunicaciones para que no puedan ordenar más crímenes en las celdas. Nuestra Ministerio Público (de la Acusación) remarca que es el origen del 95 por ciento de los hechos criminales que nuestra ciudad padece”, afirmó Javkin.
El intendente también mostró otra mapa de Rosario en donde se vieron las zonas donde más delitos produce la narcocriminalidad. “Como verán, hay una enorme concentración en cinco puntos de la ciudad (en zonas periféricas)”, señaló. “Ahí tienen que estar nuestras fuerzas actuando. Las federales y las provinciales. Allí es donde tenemos que estar. Pocas veces hay detenciones. Muchas veces hay muertes”.
Pablo Javkin anunció también la creación de una agencia local dedicada a prevenir y abordar el consumo de drogas a los jóvenes. Este ente generará, según afirmó el intendente, no sólo campañas de comunicación, sino también trabajo territorial. Trabajará con organizaciones sociales como la Pastoral Social de la Iglesia. Por otra parte, exigió que la Policía de la Provincia de Santa Fe esté en la calle para proteger a los ciudadanos por fuera de las zonas más conflictivas. “Venimos exigiendo al menos 5.000 agentes bien equipados y capacitados. Y 400 patrulleros que circulen para la prevención y la detención. Estamos lejos de ese número. Hace falta llegar a él lo antes posible”.
“Por fin de una buena vez en la agenda nacional se empieza a debatir el problema del narcotráfico en la Argentina y su particularidad en Rosario”, puntualizó el intendente. “Ahora lo importante son los resultados”. “Urbanizar, urbanizar y urbanizar porque esa es dignidad, pero también es combate a la vulnerabilidad. Oportunidades para nuestros pibes y dificultad para el accionar delictivo”. El mandatario local expresó que la sociedad debe controlar que definitivamente la acción provincial y nacional tenga resultados efectivos en la calle. “No nos queda más tiempo. Hay vidas en juego todos los días”.
Por otra parte, también se refirió al accionar de la justicia: “Falta designar jueces y fiscales. No podemos seguir con un sistema de 43 años desbordado de causas, algo inaudito para la situación que estamos viviendo”. Pidió la constitución de una policía judicial provincial con dependencia del Poder Judicial a disposición de los fiscales.
También se refirió a las virtudes de la posición geográfica de la Cuna de la Bandera dentro del país: “Estamos en el centro logístico más importante de Argentina. Desde aquí se distribuye buena parte de lo que mueve la economía nacional. Y sale el cargamento de los alimentos con los que el país comercia con el mundo”. Aseguró que por eso, la mafia usa la ciudad como punto neurálgico. “En Rosario, no se siembra droga, no se fabrican armas, no se producen balas. Las drogas, las armas y las balas llegan por las rutas y por la hidrovía atravesando miles de kilómetros sin que se las controle”.
La presidenta del Concejo, María Eugenia Schmuck, presidió la sesión y pronunció unos palabras antes del discurso del intendente. Ponderó la presencia del concejal Fabrizio Fiatti, en silla de ruedas por un problema grave de salud, que asistió al evento.