Eduardo Morena nació en Urdinarrain, en el mes de octubre de 1964, en el seno de una familia tradicional, una de las primeras que habitaron la ciudad. Hijo de Juan Eduardo Morena y Ester Schlotthauer, hermano de María Ester, su bisabuelo se estableció en 1894, pocos años después de la fecha de fundación del pueblo. Aún hoy su familia vive en la misma casa de aquel entonces.

Se podría decir que Eduardo (hijo) nació entre ruedas, ya que su padre era bicicletero de profesión y también ciclista profesional, quien comenzó con la competencia hacia finales de la década del 30, a la edad de 13 años. “Estoy seguro que mis comienzos también fueron desde muy pequeño, pero no tengo muchos recuerdos de eso. Pero cuando yo tenía unos 10 años más o menos, surgió en Urdinarrain la idea de empezar a realizar unas carreras de bicicleta a nivel local y desde aquellas participaciones nunca más paré”, dice Eduardo al mismo tiempo que una anécdota invadía su cabeza y se la contó a MIRADOR ENTRE RIOS: “Recuerdo que mi padre comenzó a los 13 años a competir con la bicicleta, y siempre contó que su primera carrera, que se hizo en la Plaza Urquiza, frente a la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, no solo fue la primera, sino que casi fue la última. En una de las vueltas, el pedal de su bici golpeó contra una raíz de árbol, generando una tremenda caída e hiriéndolo de gravedad. Su accidente lo dejó moribundo hasta que el Dr. Roig le salvó la vida. A pesar de ello, él nunca dejo la bici hasta su fallecimiento en 1998”.

DOCE VUELTAS AL MUNDO

Ya han pasado unos 48 años desde que Eduardo Morena se subió a una bicicleta por primera vez. Desde aquel entonces ha hecho unos 550.000 kilómetros, lo que equivale a un total de 12 vueltas a la circunferencia del Planeta Tierra, con un promedio de 12.000 kilómetros por año. 

Si bien es cierto que todo este recorrido lo hizo sumando el entrenamiento, la competencia, el paseo o el uso que le dio como medio de transporte, seguramente si comparamos estos números con los kilómetros que se realizan en automóvil por año, probablemente no se alcanzan a igualar.

“Nunca dejé de andar en bici en estos 48 años, pero si tuve que abandonar por un tiempo la competencia, por razones de estudio y también por cuestiones laborales, lo que no me permitía entrenar con la intensidad que requería estar en forma para afrontar las competencias. Yo me lo tomaba muy en serio. No podía pensar en participar de las carreras sino me sentía muy bien preparado para hacerlo. Pedaleaba 5, 6 y hasta los 7 días de la semana, lo que mantengo hasta hoy en día, ya que la práctica del ciclismo no escapa un poco a las generales de cualquier otra actividad en la vida, ya que también implica esfuerzo, perseverancia y mucha responsabilidad. Si bien es cierto que dejé de competir hace dos o tres años, jamás abandoné las salidas en bici”, contaba Eduardo.

No solo al ciclismo se lo tomó muy en serio, también supo que era necesario complementar los entrenamientos físicos con los mentales, por ello se preocupó por su desarrollo intelectual, escribiendo artículos, dando charlas y entrevistas, organizando grupos, actividades grupales, carreras y con la restauración de bicis antiguas, todo ello como una manera de retribuir todo lo que esta actividad le ha venido brindando.

Gracias al acompañamiento de su esposa Claudia Rometti y de sus hijos Juan Martín (30), María Inés (27) y Juan Cruz (21), Eduardo pudo recorrer calles en bicicleta de más de 11 países del mundo, y dentro de Argentina por la mayoría de las provincias. “Me siento muy bien de haber contribuido y seguir contribuyendo a bajar los niveles de contaminación ambiental, a mejorar el uso del espacio público, a reducir el gasto en salud pública para la sociedad y hacer mucho más fluido el tránsito vehicular, ya que siempre use la bici como medio de transporte para ir a trabajar, entre otras tareas cotidianas. Para que se den una idea, cuando vivía en Don Torcuato, hacía 70 km todos los días para no faltar a mi trabajo”, recordaba Morena.

GIRAR EN DOS RUEDAS

Su mundo gira en torno a esas dos ruedas, con el apoyo de pedales que tracciona para seguir adelante, surgiéndole ideas en cada cambio y con un empuje que hasta el día de hoy lo sigue motivando. Organizó varias salidas y travesías de cicloturismo en diferentes partes de Argentina. En Urdinarrain fundó y coordinó varias ediciones del Rural Bike “Arenas Blancas”, un recorrido que mezcla tramos de ripio, de arena y tierra, con increíbles paisajes sobre el Río Gualeguay. También fue uno de los fundadores del cicloturismo en Urdinarrain.

Con una gran capacidad de memoria, Eduardo recuerda que en el ámbito del cicloturismo cruzó unas 8 veces la Cordillera de los Andes, como también el haber hecho un viaje en solitario por Argentina, Uruguay y Brasil de unos 2878 km que hizo en 13 días, o esas travesías por la Quebrada de Humahuaca, los Valles Calchaquíes, las Cataratas del Iguazú, y otros lugares de Catamarca, Córdoba, San Luis, San Juan y Mendoza.

“Es una hermosa actividad, porque te permite recorrer diferentes caminos, disfrutar de hermosos paisajes, hacer tramos largos o cortos, y sobre todo mezclar entre los participantes a ciclistas de los más experimentados junto a los que recién se inician. Por eso recuerdo que el año pasado, un día antes de arrancar con el proyecto de cicloturismo en Urdinarrain, me reuní con algunos ciclistas de la ciudad, porque me preocupaba que sea una tendencia en muchos lugares, pero en Urdinarrain no. Las estadísticas dicen que de los 7 mil millones de personas que hay en el Mundo, un 75 % son adultas y de ese número un 35% anda en bicicleta, lo que nos dice que unos 2 mil millones de personas andan en bici en el mundo. Si esto lo trasladamos a nuestra ciudad, que tiene unos 12 mil habitantes, de los cuales 9 mil son adultos y de ellos un 35% pedalea, podemos decir que debería haber en Urdinarrain unos 3 mil ciclistas activos”. No conforme con ello, continuó: “Más allá de lo que uno ve normalmente, el universo a captar es mucho más grande, y por eso me sentí con la obligación de empezar a motorizar una movida ciclo turística en la ciudad, no solo por la actividad deportiva en sí misma, sino por todo lo que genera este tipo de actividad. Por ejemplo, no solo mejorar la calidad de vida de las personas que practican, sino también para fomentar el desarrollo de actividades económicas de nivel local y regional”.

ORGANIZANDO LA MOVIDA

Es así como Eduardo Morena organizó a los ciclistas de la ciudad, en un principio con salidas en grupos según su experiencia, hasta lograr equilibrarlos y realizar salidas sumando a todos los participantes. Esta actividad es solo una más del ciclismo, pero con ella comenzó a crecer el número de participantes, ya sea que se especialicen en la competencia, en el cicloturismo o por el solo hecho de dar un paseo.

“La bicicleta, según lo veo yo -decía Eduardo- te da una libertad distinta a la del caminante, porque vos andas un poco másrápido, lo que te permite recorrer distancias más largas en menos tiempo y ver los paisajes desde otra perspectiva. A medida que uno se va entusiasmando, vas entendiendo que no hay límites. En mi caso he subido montañas de más de 4.000 metros, de altura en bicicleta, he andado con lluvia, nieve, calor y frío en terrenos de todo tipo, pero entiendo que esto es algo que lo puede hacer cualquiera. Como dije anteriormente, solo se requiere práctica, compromiso y perseverancia”.

Récords personales

- Hizo travesías con la modalidad de ciclo turísticas, como también su participación de competencias en 11 países americanos y europeos, en 17 (de las 24) provincias argentinas, y en 13 (de los 19) departamentos uruguayos.

- Anduvo sobre la bicicleta unas 150 veces por encima de los 3.000 msnm (mayoritariamente durante su residencia en La Paz-Bolivia), alcanzando las alturas máximas en el Nevado de Toluca (México) a 4.214 msnm, en la Cuesta de Lipán (Jujuy) a 4.194 msnm, en El Alto (Bolivia) a 4.115 msnm, en el Monumento al Cristo Redentor (Mendoza/Chile) a 3.837 msnm, en el Túnel de Las Cuevas (Mendoza) a 3.216 msnm y en la Cuesta del Infiernillo (Tucumán) a 3.058 msnm.

- Subió varios de los puertos montañosos más famosos del Tour de France, como el Tourmalet, Alpe D´Huez, Aubisque, y asistió durante 3 años como espectador del mismo.

- Uno de sus récords personales, si se tiene en cuenta los mayores desniveles acumulados alcanzado en un mismo día, fueron: (1) 3.618 metros en L´Eroica (Italia), a lo largo de 209 km, tardando 12 horas, (2) 3.600 metros en 140 km entre Santiago de Chile y Portillo (en 2 oportunidades), (3) 3.500 metros en los 100K de Mineral del Chico (México), pedaleando 7 horas con mountain bike.

- La distancia máxima recorrida en un día fue de 285 km, uniendo la ciudad de Urdinarrain con Olivos (Bs. As.) con varios desvíos intermedios, y la distancia máxima recorrida en un mismo proyecto fue de 2.878 km en 13 días, en un viaje por Argentina, Uruguay y Brasil.

- El desarrollo de mayor velocidad alcanzada fue de 89,6 km/h, entre Las Cuevas y Puente del Inca.

Logros deportivos

- Corrió 388 carreras de bicicleta (297 de circuito/pista/ruta y 91 de rural/rally/mountain bike). - Participó en 59 duatlones/triatlones, organizado por 91 ciudades diferentes.

- 3 veces Campeón Entrerriano en especialidades de Pista en categorías juveniles (década 1980).

- 3 veces Subcampeón Entrerriano en especialidades de Pista en categorías juveniles (década 1980).

- 1 vez Subcampeón Entrerriano de Ruta en categoría Elite (década 1980).

- 5 veces subcampeón Entrerriano de Duatlón

- 7 veces Top-10 (incluyendo un 2do puesto) en el Rally Bike mas afamado de Sudamérica

- Participación en Río Pinto (décadas de 2000 y 2010).

- Triunfos en Rural/ Rally Bike en categorías Master (décadas de 1990, 2000 y 2010)

- Rally de Tandil.

- Desafío de los Dinosaurios en Chile, Cruce de Cordillera entre Villa La Angostura y Entre Lagos - Chile.

- Desafío Cerro Pan de Azúcar (Córdoba),

- Rally Selva de Montiel (Federal),

- Vuelta al Partido de General Alvarado (Miramar),

- Vuelta al Departamento Nogoyá.

- Competencias en provincia de Bs. As., como en Los Cardales, Capilla del Señor, Carlos Keen, Tandil, Mercedes, Rojas y Colón.

- Triunfos en Ciclismo de Pista y Circuitos. Duatlón/Triatlón en categorías juveniles y mayores durante las décadas de 1970, 1980 y 1990)

- Segundo puesto en Gran Fondo New York edición Argentina 2019 de San Juan, en categoría Master.

- Estuvo en 5 ocasiones en la ciclo turística “vintage Eroica” en distintos países.

- Obtuvo 460 premios, entre trofeos, copas, medallas, diplomas y dinero. Ganó algo de 60 carreras.

- Organizó y coordinó competencias y pedaleadas de cicloturismo, escribió notas en revistas y blogs, entre otros. Dio charlas sobre ciclismo en muchas oportunidades y siempre encuentra el tiempo de restaurar bicicletas antiguas.