Las competencias nacionales e internacionales ya van entrando en etapa de definiciones importantes y a los distintos entrenadores ya se les agota los pretextos de una pretemporada muy intensa, de un mercado de pases gasolero o del poco conocimiento entre los viejos y los nuevos jugadores. La Liga Profesional argentina ya anda por la fecha 12, casi en la mitad del camino. Y la Copa Sudamericana empieza a confirmar sus candidatos en los diferentes grupos, después de dos fechas disputadas. En ese contexto, Miguel Ángel Russo y Gabriel Heinze, los entrenadores de Central y Newell's respectivamente, ya reconocen las identidades de sus equipos, que no es poca cosa en el fútbol argentino, que hoy se caracteriza más por las carencias que por las abundancias.

Habla en Russo
“Ahora somos otra cosa, de la cabeza somos otro equipo y eso es bueno”, tiró Miguel Russo luego del empate del lunes en Tucumán, que le dejó a los canallas un sabor amargo en la boca por la forma en que se dio. Central es uno de los animadores del campeonato, aunque la igualdad ante Atlético lo dejó bastante lejos de River, que tiene paso arrollador y, si bien falta mucho, ya empieza a ser difícil pensar en otro candidato a quedarse con el título. De todos modos, el experimentado entrenador auriazul rescata la base de rendimiento colectivo que logró en este corto tiempo.

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Russo conoce como casi nadie el estilo de juego que mejor le sienta a Rosario Central. Este es su cuarto ciclo en el club y tiene las espaldas muy anchas como para probar a su antojo e imponer las condiciones que se ajustan a sus gustos. Pero, además, una de las virtudes de este DT es saber adecuar las formas a los jugadores que tiene en el plantel.

“No es simple jugar de visitante, dar vuelta el resultado y pasar a ganar, buscamos que sea de la misma manera de local y visitante”, resaltó Russo tras el 2 a 2 del lunes pasado con el “Decano”. A las palabras del conductor canalla no le faltan verdad, ya que después de los flojos partidos de Central ante Sarmiento en Junín y ante Unión en Rosario, el conjunto de Arroyito se afianzó y se convirtió en un equipo difícil de vencer.

Russo no ahorró elogios hacia la forma en que sus dirigidos se plantaron en una cancha difícil como la del “Decano” tucumano: “Jugamos a la forma de Central, con errores y con todo, esto es fútbol y no podemos predecir todo lo que podía pasar. Ahora somos otra cosa, de la cabeza somos otro equipo y eso es bueno. Te duele el empate sobre la hora, por más que sea una acción fortuita”, apuntó.

Pensando en lo que viene, que es nada más y nada menos que Boca -este domingo a las 15.30 en el Gigante de Arroyito-, Russo lamentó la lesión que sufrió Ignacio Malcorra: “Es nuestro cerebro futbolístico, ve los errores y por dónde atacar, pero esto forma parte del juego. Es un golpe, esperemos que esté bien para el domingo”.

Por último, mostró su respeto hacia Boca, que este domingo visitará el Gigante: “Boca siempre es Boca, tiene mi respeto siempre por más que digan que no anda bien”, cerró.

Un “Gringo” arraigado
Gabriel Heinze empieza a ver cómo el trabajo que planificó cuando aceptó ser el entrenador de Newell's, empieza a dar sus resultados. La Lepra viene de jugar sus tres mejores partidos en el semestre, aunque uno de esos encuentros haya terminado en derrota, injusta por cierto. En el triunfo de visitante ante Racing, la derrota inmerecida de local frente al puntero River, y la goleada del martes sobre Blooming de Bolivia por Copa Sudamericana, Newell's mostró los primeros trazos nítidos del “estilo Heinze”.

Hay algo de contradicción en el mensaje del “Gringo”, aunque todo debe enmarcarse en sus constantes enfrentamientos con la prensa. “El resultado no me interesa, hubiera pensado lo mismo del rendimiento de mis jugadores si no hubiésemos conseguido los tres puntos”, confió el DT luego del notable triunfo en Avellaneda sobre Racing. Sin embargo, cuatro días después declaró que el gol de River sobre el final del encuentro lo puso “triste” y que fue “un mazazo para todos”. En realidad, lo que el DT está reconociendo es que funcionamiento y resultados están empezando a ir de la mano.

“Estoy contento porque jugamos bien y porque el equipo mostró lo que sabemos que puede ofrecer. Sé que tengo un equipo que hace todo lo posible para que las cosas salgan bien”, analizó el “Gringo” luego de la goleada del martes sobre Blooming, que lo pone como líder del Grupo E de la Copa Sudamericana.

No hay demasiado tiempo para el festejo en Newell's, ya que este sábado a las 20.30 se le viene la difícil excursión a Córdoba para visitar a Belgrano. Y otra vez se plantea la duda sobre la rotación de jugadores, a lo que Heinze respondió: “Cada partido es distinto al anterior, lo que hacemos es tratar de posicionar al equipo según lo que creemos que es correcto. Para mí no hay titulares ni suplentes. Solamente decido el día del partido en poner a los que mejor veo ese día”.