Miguel Acosta, presidente de la Vecinal San Francisco Javier, expresó su gratitud hacia Belén Lazzaroni, Bernardo Gine, Agustín Neme y Giancarlo Padoan miembros de la agrupación Pocho Leprati, por su incansable labor y dedicación en la organización de este evento especial.

“Hay regalitos personalizados con nombre y apellido, y tenemos algunos más porque sabemos que hay muchos chicos. Felicitarlos y agradecerles, porque los niños se van a poner muy contentos por esto, y nosotros, los adultos, también estamos emocionados al ver la dedicación que le han puesto", afirmó Acosta.

Alicia Ocampo, secretaria de Cultura, destacó la elección de la Vecinal como lugar de celebración y elogió el trabajo realizado por la agrupación. "Cuando se contactaron con los chicos del municipio, inmediatamente nos pareció que la vecinal era un lugar adecuado y ya los chicos sabían. Darle la bienvenida a la agrupación, porque esto para los chicos es un orgullo y la felicidad que van a tener esta tarde es indescriptible", expresó Ocampo.

Belén Lazzaroni, de la agrupación Pocho Leprati, compartió el propósito y el origen de su labor solidaria: "Somos una agrupación que vive en la ciudad de Santa Fe, pero somos chicos del interior. Nos dedicamos a brindar asistencia y
alimentación a personas en situación de calle en Santa Fe. Decidimos colaborar con una vecinal de San Javier para el Día del Niño porque uno de los integrantes es de aquí. Nos contactamos con Miguel, y así fue como nos conocimos. Estamos muy contentos de poder participar y colaborar".

Bernardo Gine, otro miembro de la agrupación, explicó cómo se reunieron los regalos para los niños: "Fue una colaboración principalmente de amigos y conocidos. La vecinal también aportó mucho, y amigos nuestros, a través de mensajes en redes sociales, nos acercaron los regalos. Así fue como lo logramos".

La agrupación Pocho Leprati nació durante la pandemia con la intención de ayudar a los más necesitados. Belén Lazzaroni compartió su experiencia: "La idea de la agrupación surgió en la pandemia cuando nos encontramos con una situación crítica. Quisimos ver cómo ayudar desde nuestro pequeño lugar. Somos cuatro personas, no tenemos ingresos, ni afiliación política ni religiosa. Dependemos completamente de la generosidad de la gente. Hace tres años, todas las semanas cocinamos y repartimos alimentos a las personas necesitadas en Santa Fe. Tenemos un grupo fijo de beneficiarios y, ocasionalmente, se suman otros. Entre 20 y 30 adultos reciben nuestra ayuda cada semana".

El evento, que contó con la colaboración de la Municipalidad de San Javier y de personas generosas de la comunidad, fue un ejemplo de solidaridad y amor hacia los niños en su día especial. La decoración y el ambiente festivo, preparados por Irma Bachías y un grupo de mujeres de la vecinal, añadieron un toque especial a la celebración.