En busca de lograr un equilibrio entre costos y servicio, es que se planifica incrementar la cantidad de unidades de colectivos que circulan por las calles de Rosario antes de fin de año, pero, a su vez, con un nuevo estudio de costos en ciernes, también se ajustaría el boleto del transporte.
Después de haberse sincerado la concesión, tal y como se había firmado previo a la pandemia que obligó a retocarla, ahora el Ejecutivo pretende alcanzar el número de vehículos que está previsto en los papeles. Esto conduce a incorporar 40 coches más, es decir, pasar de los actuales 690 a 730 unidades para el inicio del ciclo lectivo.
El objetivo de cara al año que viene es contar con 780 colectivos circulando. Es un desafío para la gestión local que sigue manifestando malestar por la discriminación en los subsidios que distribuye Nación y que obliga a que el Interior deba afrontar protestas sindicales y desfasajes de costos.
En tiempos donde la insatisfacción con el sistema de colectivos se mantiene vigente entre los vecinos y vecinas de la ciudad y según ratifica el último informe del Observatorio Social del Transporte (OST), el aumento de colectivos debería mejorar las frecuencias y los recorridos.
Por otro lado, en octubre se presentará el nuevo estudio de costos municipal, anticiparon a Mirador Provincial desde el Concejo. Es el informe que expone cuánto debería costar el ticket del ómnibus urbano en base a diferentes indicadores, entre ellos, la inflación y los recursos que provienen de Nación a modo de subsidio.
Actualmente en Rosario el boleto cuesta 120 pesos. Esta cifra se alcanzó tras el último aumento del 20% realizado en junio. Se dio en el marco de un acuerdo entre las provincias para ajustar el ticket de forma simultánea en pos de exponer la desigual repartija de fondos que se hace entre Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y el resto del país.
Un dato no menor es que el Intendente de Rosario, por aprobación del Concejo, tiene la potestad de retocar la tarifa del transporte de forma unilateral, algo que, en lo que va del 2023, ejecutó en tres oportunidades solamente con una inflación que rondaría el 140% anual.
Recientemente Córdoba ajustó el ticket del ómnibus. La medida, según justificó el secretario de Transporte de la Municipalidad de Córdoba, Marcelo Rodio, es que “Nación entregó 9 mil millones de pesos del impuesto de todos los argentinos para congelar la tarifa del boleto del transporte. Así es fácil no modificar las tarifas. Allí pagan 53 pesos contra 185 en Córdoba, Santa Fe y Rosario”.
Ante este escenario, la ciudad de Santa Fe también aplicó un aumento para actualizar el costo del transporte. En esta ocasión se llevó de 120 a 185 pesos en septiembre. No obstante, ya adelantaron que en noviembre el boleto pasará a costar 220 pesos, para no quedar tan desfasado con el índice inflacionario.
En Rosario, el propio Intendente reelecto, Pablo Javkin, admitió a La Capital que, si bien la tarjeta Sube morigera el impacto del costo en los sectores más vulnerables, después de conocer el nuevo estudio de costos, más un análisis inflacionario y las subas de la nafta, “analizarán el tema”.
Otro tema que se pretende para el año que viene es poder incorporar otra línea eléctrica: la M. La intención es lograr una transición de coches que funcionan con nafta hacia los eléctricos o de gas licuado.
Hoy en día hay tres unidades reconvertidas a batería eléctrica en la línea K y habrá un cuarto en breve. La empresa Inventu es la que se está haciendo cargo de reconvertir los coches y, de sostenerse esta tendencia, la intención de la firma es poder expandirse más allá de Rosario.