Dos años después la Laguna Juan de Garay volvió a la vida
Se recordó el trabajó que hizo un grupo de voluntarios para rescatar a 57 tortugas que habían quedado atrapadas producto de la sequía.
Se recordó el trabajó que hizo un grupo de voluntarios para rescatar a 57 tortugas que habían quedado atrapadas producto de la sequía.
Hace dos años, un grupo de voluntarios se unió en un esfuerzo gigantesco para rescatar a las tortugas que quedaron atrapadas en la laguna Juan de Garay de Santo Tomé, afectada por una bajante extraordinaria.
La sequía extrema conmovió a la comunidad, y la situación requería una respuesta rápida y coordinada. Javier Maillo, guardavida y miembro de la Mesa Territorial Ambiental, lideró la iniciativa que no solo salvó a las tortugas sino que también dejó una profunda huella en la conciencia ambiental de la región.
En una reciente visita a la zona, el equipo de Mirador pudo constatar el cambio radical en la postal de la laguna Juan de Garay. Maillo, en una entrevista con el medio, recordó los eventos de aquellos días y compartió cómo la comunidad evolucionó desde entonces.
"Estamos en un lugar donde hace dos años, la postal era totalmente diferente; estábamos pasando por una sequía increíble, algo que realmente nos conmovió a todos. Estamos tan desacostumbrados a ver ahora agua en este lugar que nos convoca un poquito a recordar lo que ocurrió hace dos años", expresó Maillo mientras miraba la extensión acuática que se desplegaba ante él.
Un antes y después
La memoria lo llevó a narrar la movilización de voluntarios y ambientalistas que se enfrentaron a la difícil tarea de rescatar a las tortugas atrapadas. La situación exigía una respuesta inmediata, y el grupo, junto a biólogos que brindaron las recomendaciones necesarias para poder desarrollar las tareas, optaron por realizar un traslado para proteger a estos animales. "Fue bastante complicado llegar hasta el lugar donde estaban. Nos metimos en un charco con lodo y agua. Había algo así como 57 tortugas de todos los tamaños. Logramos rescatarlas en una operación que demandó dos días de trabajo", compartió Maillo.
Dos años después, el cambio en la laguna es evidente. El entrevistado señaló: "Hoy en día, tenemos un poco más de noción de que todas las acciones que estamos desarrollando en la vida tienen un efecto sobre el medio ambiente y sobre las generaciones que van a venir". Destacó la importancia de aprender de las experiencias pasadas y de la conciencia colectiva que surgió desde entonces.
Maillo reflexionó sobre la laguna Juan de Garay en las condiciones actuales. "Estamos felices porque volvió la vida, volvió el agua. En este momento, tenemos una gran cantidad de aves y pequeños batracios, ranas y demás que están habitando en la laguna", expresó con entusiasmo.
Sin embargo, el integrante Mesa Territorial Ambiental también abordó los desafíos que enfrenta la laguna debido a intervenciones humanas pasadas, como el bloqueo del canal que nutría de agua fresca del río Salado. Esto limitó la fauna que puede habitar en el área. A pesar de los desafíos, el renacimiento del ecosistema local es evidente y motiva a la comunidad a seguir trabajando por la preservación ambiental.
En cuanto a las acciones individuales, Maillo enfatizó que cada pequeño gesto cuenta. "Lo primero y principal es dejar las cosas como están o mejorar el lugar. No dejar basura, mejor dicho. Si encontramos algo, un papelito, lo juntamos, lo llevamos y lo tiramos donde corresponde. Cada pequeña acción genera una gran reacción", instó.
El llamado a la responsabilidad ambiental se extendió a aquellos que visitan la laguna Juan de Garay. Maillo pidió a la gente que contribuya, ya que cada pequeña acción es fundamental para mejorar el medio ambiente. "Son acciones replicadoras. Uno muchas veces, cuando ve que alguien recoge un papelito, después le da un poco de vergüenza propia tirar ese papelito", señaló.
La delegación de “La Invencible”, con 96 preseas, obtuvo el primer puesto en el medallero de la competencia interprovincial disputada en Mar del Plata. El podio lo completaron Córdoba y Río Negro. Los deportistas santafesinos, que compitieron en 36 disciplinas, habían sido elegidos tras participar de todas las etapas de Santa Fe en Movimiento.