El Torneo Federal Amateur se vio sacudido por un escándalo que dejó una mancha en la competición y en el fútbol argentino en general. Colón de San Justo, único representante de la Liga Santafesina de Fútbol, fue eliminado y multado por agredir a un cuerpo arbitral después de perder un crucial partido por el ascenso al Federal A contra Deportivo Rincón de Los Sauces de la provincia de Neuquén.
El tribunal de disciplina tomó medidas drásticas contra el equipo de San Justo, imponiendo una multa y suspendiendo a seis futbolistas del club. Tomás Martín Baroni y Leandro Bertola recibieron una suspensión de un año, mientras que Franco Marcelo Jominy, Alexis Martín Palacios y Cristian Sebastián Zilli fueron suspendidos por 10 partidos. Matías Orlando Fantín fue sancionado con dos encuentros de suspensión.
La decisión del tribunal también afectó el desarrollo del torneo, ya que Colón de San Justo no podrá disputar la semifinal por el quinto ascenso. En su lugar, Altos Hornos Zapla clasifica directamente a la final, donde enfrentará al ganador entre Camioneros y Defensores de Formosa.
El incidente que desencadenó la eliminación de Colón de San Justo ocurrió durante la serie de penales contra Deportivo Rincón. El arquero de Colón, Gonzalo Cháves, detuvo un disparo de manera legal, pero el árbitro, de pésima actuación y junto a sus asistentes, ordenaron repetir el penal por un presunto adelantamiento. En el segundo intento, Deportivo Rincón convirtió el gol que le dio la victoria y el ascenso al Federal A.
La reacción violenta del equipo de San Justo, rodeando al árbitro y sus colaboradores para agredirlos con golpes y empujones, fue repudiada por el tribunal y la comunidad futbolística en general. El hecho lamentable ensombreció lo que pudo haber sido un momento de celebración y éxito para el equipo de San Justo, que estuvo cerca de lograr el ansiado ascenso al Federal A.
El presidente de Colón de San Justo expresó su decepción por el desenlace del torneo y criticó el desempeño de la cuaterna arbitral. Consideró que el trabajo de los árbitros fue insatisfactorio y que el tribunal no actuó con la debida contundencia para sancionarlos.
El episodio deja una lección amarga para el fútbol regional y nacional, destacando la importancia del fair play y el respeto hacia las decisiones arbitrales. Además, plantea la necesidad de revisar los protocolos de seguridad y las sanciones disciplinarias para prevenir incidentes similares en el futuro.
El escándalo en el Torneo Federal Amateur deja un sabor amargo y una mancha el fútbol argentino, recordando la importancia de valores como el juego limpio y el respeto hacia los árbitros y viceversa en la búsqueda de un deporte más justo y equitativo.