En un hito que marcó la historia y consolidó a Argentina como pionera en la investigación y cooperación científica antártica, el país celebra los 120 años de presencia continua en el continente helado. La conmemoración se remonta al 22 de febrero de 1904, cuando la bandera argentina fue izada por primera vez en el observatorio meteorológico y magnético en la isla Laurie, Orcadas del Sur.
Esta política de Estado ha convertido a Argentina en un referente en la protección ambiental y el mantenimiento de la paz en la región antártica, demostrando compromiso con la ciencia, la técnica y la cooperación internacional. Desde aquel histórico momento en 1904, Argentina ha mantenido una presencia ininterrumpida en la Antártida, siendo el Instituto Antártico Argentino (IAA) el coordinador central de las investigaciones científicas desde 1951.
En Concordia se llevó a cabo un acto en la Plaza 25 de Mayo. El presidente municipal, Francisco Azcué, expresó que son muchísimos los concordienses que han dedicado su vida a hacer patria, a brindar su vida por la soberanía en la Antártida y nos parece muy importante honrarlos y homenajearlos.
“Es un momento de nuestra historia en la que tenemos que apelar al patriotismo para sacar adelante a nuestro país, a nuestra provincia y para que nuestra ciudad se ponga de pie. Hoy más que nunca necesitamos despojarnos de cualquier interés personal y mostrar a la comunidad que somos servidores públicos y eso es lo que encontramos en nuestras Fuerzas Armadas, en las Fuerzas de Seguridad y en estos patriotas que entregan su vida a servir. Es un honor contar entre nosotros con personas que estuvieron en la Antártida, que son un ejemplo. Y nosotros queremos justamente mostrar esos ejemplos y contagiarlos a nuestra población con el sentimiento patriótico y vocación de servicio; ya que ellos representan y promueven todos los valores que necesitamos para salir adelante”, remarcó Azcué.
También presente en el lugar, el meteorólogo Miguel Ángel Thea destacó la importancia de “reconocer a aquellos que hemos pasado y a los que están hoy en este momento cumpliendo funciones en el desierto blanco”.
En efecto, señaló que “es mi lugar en el mundo, haber llegado a ese lugar tan inhóspito, con apenas 27 años, fue el destino que marcó mi vida y como siempre decimos nosotros los antárticos con una frase que dice que cuando llegaste no me conocías y cuando te vayas me llevarás contigo; es todo para mí la Antártida”.
El continente más austral de la Tierra es, para Thea, el lugar donde “entregar la vida a la patria, hacer soberanía en todos sus sentidos, no solamente con el trabajo, con la parte científica, con los guardaparques, con todos los tipos de científicos que van; es eso la Antártida”.
“Hay que reconocer a las familias que quedan acá en el continente, durante un año o un poco más de un año; sobre todo a las esposas o esposos también que quedan solos a cargo de sus hijos durante todo ese tiempo lejos de su pareja”, remarcó.
Consultado acerca de si le gustaría volver, Thea no lo dudó. “Lo juro que sí, la verdad es que es un sueño poder volver y antes de que llegue mi retiro me encantaría poder llegar a volver a pisar el suelo antártico”, puntualizó el trabajador del Servicio Meteorológico Nacional.