El viernes por la noche, entre la lluvia interminable y las luces mojadas del Parque Independencia de Rosario, los hinchas de Newell’s se fueron masticando bronca y desazón. La misma sensación embargó a los jugadores “leprosos” y al técnico Mauricio Larriera, que un rato ante vieron cómo se les escapó una gran chance de avanzar hacia la clasificación a los cuartos de final de la Copa de la Liga. El desangelado empate ante Platense actuó como una puñalada a la ilusión “rojinegra”, que se había agrandado luego de la victoria sobre Tigre y el buen empate conseguido en Mendoza frente a Godoy Cruz.

Frente a un conjunto con pocos puntos y menos luces, Newell’s no tuvo ideas para quedarse con tres puntos que hubieran sido vitales en la recta final de la Zona B del torneo.

Quedan tres fechas para que se resuelvan los ocho clasificados –cuatro por zona– a los cuartos de final de la Copa de la Liga. Dos de esos partidos, Newell’s los jugará de visitante, frente a Sarmiento, en Junín; y contra Defensa y Justicia, en Florencio Varela. En el medio de esos dos encuentros disputará el único que le queda de local, nada más y nada menos que ante Boca, en un duelo que ya se palpita como una final.

El empate de este viernes 15 de marzo con Platense dejó muy preocupado al DT Larriera. Y tiene fundamentos para sentirse así. Cuando termine esta undécima fecha del torneo y antes del parate por los amistosos de la selección por la fecha FIFA, es probable que Newell’s se vea afuera de los cuatro primeros lugares de su zona. Lo acechan Boca, Defensa y Justicia y Unión, que le pueden quitar su lugar de privilegio. Si logra mantenerlo, será una buena señal que le da el certamen.

EVALUACIÓN

Sobre el pobre empate del viernes, el técnico Mauricio Larriera evaluó que “los nervios nos fueron ganando”. Y luego sintetizó: “Es bastante simple lo que tengo para decir, más allá de las estadísticas, cuando estos equipos no se les convierte en el primer tiempo después se complica”.

“El equipo de inicio creímos que era lo mejor que podíamos poner y los cambios obedecen a la idea de ir a ganar el partido. La victoria era totalmente necesaria. Nos quedamos con la frustración de no poder ganarlo”, reconoció el conductor táctico uruguayo. Y agregó: “Hace tiempo que elijo el pragmatismo a mi idea de juego, pero son decisiones personales. Lo que sí me gustó es que el equipo fue al frente”.

Más allá de esperar los otros resultados de la fecha, con especial atención en sus rivales directos, ahora el plantel de Newell’s debe pensar en el debut en Copa Argentina, una competencia que suele traerle grandes dolores de cabeza a la “Lepra”. Será el viernes de la semana que viene, a las 15, frente a Midland en el estadio de Colón. Es otro de los objetivos que se planteó el club para este 2024. Habrá que ver con qué equipo decide jugar Larriera ese encuentro, pero se presume que irá con todos sus titulares.

EL EQUIPO

Entre esos futbolistas que iniciarán el camino en la Copa Argentina, seguramente estará Ever Banega, que todavía debe una fecha de suspensión por la tarjeta roja que le mostró Fernando Rapallini en la fecha anterior ante Godoy Cruz. El ex futbolista de Atlético Madrid y la selección se perderá el próximo partido de la Copa de la Liga, frente a Sarmiento de Junín, y estará habilitado para volver contra Boca, en el “Coloso Marcelo Bielsa”.

Pero a la vez, Larriera perderá para ese encuentro a sus dos defensores centrales titulares. Gustavo Velázquez fue convocado a la selección paraguaya, para disputar los amistosos de fecha FIFA; Ian Glavinovich fue citado por Javier Mascherano para el seleccionado argentino Sub 23 que se pone a punto para los Juegos Olímpicos de París 2024.

En resumen, a Newell’s le quedan tres cosas para hacer hoy y los días que siguen: recuperar a los futbolistas que están al límite en lo físico –el lateral Armando Méndez, por ejemplo–, preparar el choque del viernes ante Midland por Copa Argentina, y rezar para que sus rivales directos en la Zona B no lo desplacen del reducido lote de clasificación a la siguiente fase.