“Después de varios años, lo volvemos a tener en la zona”, advirtió el técnico Amilcar Martel, especialista en monitoreo de cultivos, al detectar en lotes de algodón del departamento 9 de Julio la presencia del picudo del algodonero, la plaga más peligrosa para el cultivo.
En la presente campaña, con la carga ya definida y el proceso de recolección en marcha, el insecto no representa una amenaza. Pero sí “se complica mucho para el año que viene…”, anticipó.
La situación viene siendo monitoreada por las 8 Comisiones Zonales Sanitarias (CZS) que se desempeñan en territorio santafesino. En la última “Revista para el Sector Algodonero”, que difunde la Secretaría de Bioeconomía de la Nación, los técnicos de la Asociación para la Promoción de la Producción Algodonera (APPA) y del Ministerio de Desarrollo Productivo de la provincia señalaron que el problema está presente en ambas regiones productivas: tanto en el Este como en el Oeste.

En el Este, departamentos General Obligado, Vera y San Javier, reportaron aplicaciones contra picudo del algodonero, plaga que “en las últimas dos campañas la presencia fue baja, pero que en ésta, la presión fue y sigue siendo alta”. El cuadro, “obligó a realizar controles durante marzo en varios lotes con fecha de siembra tardía, para asegurar la fijación de las últimas posiciones”.
El informe indica que “esta alta población de picudo comienza a preocupar para la próxima campaña, por lo que se insiste en recordar a los productores sobre la importancia del vacío sanitario durante el invierno”.
Por otra parte, en una zona del Oeste santafesino (departamento 9 de Julio), desde el distrito San Bernardo hacia el sur, la mayoría de los lotes se encuentran en estado regular a causa del stress hídrico que sufrieron en el verano. “Se pensó en una segunda floración, que finalmente no llegó a ser importante, ya que las precipitaciones de marzo también fueron muy bajas”, indica el informe.
“Actualmente estos lotes se encuentran con poca carga y algunos de ellos están descuidados, siendo atacados por el picudo”, señala, y alerta: “en ésta zona la situación es crítica”.
La misma situación se detectó en la zona de los Bajos Submeridionales y el norte de los departamentos Vera y 9 de julio. “También se encuentran este tipo de lotes, pero en una proporción menor, ya que las precipitaciones de marzo fueron mejores”.
Puntualmente sobre la situación con el picudo en esa parte de la provincia, los técnicos observaron cierta disparidad: “lotes con alta presión pero con manejo adecuado y lotes con baja presión de la plaga que al momento no requirieron controles”.
Al cierre de marzo, cuando se elaboró el informe, “no se reportaron lotes perdidos por picudo o con un daño tal que provoque una reducción importante de rendimiento”. Pero, aclaran que se observan las estructuras reproductivas que ya no llegarán a cosecha, con daño. Por lo que también para esa región se remarca a los productores la importancia del vacío sanitario durante el invierno.