La asociación Integrar para Incluir (IPI) promueve el vínculo entre docentes de la escuela Nuestra Señora de Lourdes, en Concordia, y profesores y estudiantes de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER).

IPI es una asociación civil sin fines de lucro que lleva a cabo un proyecto de gestión socioeducativa en Concordia “buscando la dignificación de los menores y jóvenes de familias en situaciones vulnerables”. Con este objetivo IPI promueve, organiza y fomenta actividades para los menores que asisten a los distintos niveles de enseñanza de la Escuela Privada N°27 “Nuestra Señora de Lourdes”, la mayoría de los cuales proviene de familias vulnerables de los barrios Gruta de Lourdes, Ex Aeroclub, Almirante Brown y Carretera La Cruz, todos de la zona sur de la ciudad de Concordia.

Como parte de un proyecto de extensión universitaria que comenzó a desarrollarse en marzo de 2024 y se extenderá hasta marzo del año próximo, diez estudiantes y dos docentes de la Facultad de Ciencias de la Administración realizaron un relevamiento del equipamiento informático del establecimiento educativo mencionado.

“Advertido por integrantes de IPI sobre la necesidad de la comunidad educativa de Lourdes de contar con herramientas informáticas adecuadas para mejorar los procesos de enseñanza, el profesor Juan Carlos Teze impulsó en la UNER el proyecto en el que IPI y la escuela de Lourdes son instituciones copartícipes y que en esta primera etapa dará apoyo a la escuela primaria, quedando abierta la posibilidad de ampliar la iniciativa o diseñar una nueva para brindar una asistencia similar en el nivel secundario”, informaron desde la Universidad.

“La escuela de Lourdes cuenta con una treintena de tablets y una quincena de notebooks, obtenidas a través de programas de donaciones de sectores privados y actualmente en buenas condiciones la mayoría de ellas”, precisaron luego.

OFRECER APOYO

Entre las iniciativas del equipo de la UNER, destacaron la instalación de “aplicaciones y/o plataformas que fortalezcan la enseñanza y práctica de la lectocomprensión. Se trabajarán aspectos como la memoria, los juegos dirigidos a ejercitar la atención de los más pequeños y, para los más grandecitos, la interpretación de consignas. También se realizarán talleres para capacitar a los docentes en el uso de nuevas herramientas”.

“Nuestro objetivo es reforzar el aprendizaje de los chicos y ofrecer apoyos a lo que vienen haciendo los docentes de primaria”, dijo Teze quien destacó que el grupo de voluntarios es interdisciplinario y está integrado por alumnos y docentes de las carreras Licenciatura en Sistemas y Tecnicatura Universitaria en Desarrollo Web.

Noelia Sánchez, directora de primaria de la escuela de Lourdes comentó que “este tipo de ofrecimiento de ayuda no es habitual” y recordó que los programas del Gobierno de acceso a las TICS, que distribuyen tablets y ofrecen capacitaciones a docentes, no alcanzan a las instituciones educativas de gestión privada. De ahí que aprecian y agradecen especialmente esta iniciativa. “Ellos vienen a aportar herramientas a lo que los docentes trabajan en el aula. Para nosotros es genial, porque sabemos que nuestros alumnos no tienen acceso a muchas ayudas y que todo lo que se les ofrece para su futuro lo reciben acá, en la escuela”, mencionó.

RELEVAMIENTO

La gestión del intendente Francisco Azcué tiene, entre sus prioridades, la idea de tratar de cerca el “estigma” de la ciudad, apuntada según las estadísticas de Indec como una de las más pobres del país.

Concordia presentó, durante la última semana, el programa “Relevar”. Desde la Municipalidad hacen visitas a los barrios y censan a los vecinos, obtienen datos sobre el nivel de vida, el contacto con los centros de salud, el nivel educativo y la vivienda.

Al respecto, el secretario de Desarrollo Humano de Concordia, Sebastián Arístide, dijo a Mirador Entre Ríos: “Hacemos el trabajo en los barrios populares. Relevamos 14 barrios, trabajando de mañana y de tarde. Además de eso hacemos abordajes en los barrios con equipos interdisciplinarios que se encargan de atender las necesidades de las personas con una atención urgente de lo más inmediato”.

“Obtenemos datos todas las semanas y los ponemos en una base que procesa la fundación Conin, eso es enviado a distintas áreas del municipio. Notamos que tenemos un altísimo porcentaje de deserción escolar en primaria y secundaria. Impacta obtener los resultados y tener tantos nombres de chicos que no van a la escuela, eso nos interpela realmente. Además, encontramos, lamentablemente, a 60 personas que jamás pisaron una escuela. Esas son personas analfabetas, personas que no están insertadas en la educación, eso nos condena como ciudad a seguir ligados a estadísticas negativas”, explicó al referirse a la situación en cuanto a la educación.

Con el programa, además de conocer las situaciones que atraviesan los barrios populares, en los que las necesidades están a la orden del día, buscan generar espacios como el que IPI lleva a cabo en la zona sur para que la realidad de esas personas “condenadas a repetir la historia” cambie y lleve a generar un círculo virtuoso que permita liberarse del “estigma” de la pobreza.