“Surgió la idea de realizar una charla-taller dirigida a los docentes en el marco del día internacional de la audición cuya fecha es el 3 de marzo, instaurado por la Organización Mundial de la Salud para promover acciones globales y de esta manera visualizar lo que son las pérdidas auditivas”, explicó María Florencia Velázquez en diálogo con Mirador Entre Ríos.
La conferencia, dedicada a docentes, tuvo lugar en el Centro de Convenciones de Villaguay. Allí, las conferencistas se enfocaron en las características de las personas con pérdidas de mayor o menor grado de la audición resaltando las diferencias entre ellas, como así también su tratamiento adecuado. Además, se dedicó tiempo a explorar las diferentes etapas del lenguaje y cómo se desarrolla en los niños.
“De manera global se considera que alrededor del 20% de niños y adultos presenta pérdidas auditivas y en el mundo actualmente hay 34 millones de niños que con problemas relacionados con la audición”, agregó la licenciada en Fonoaudiología.
“Si nos ponemos a pensar qué es la audición podemos definirla como la forma más sofisticada de poder extraer información de todo lo que nos rodea en el mundo. Tiene un gran significado biológico por la relación con el desarrollo del lenguaje y las implicancias sociales que de ello devienen, porque junto con el habla representan el medio principal de la comunicación interpersonal”.
DIFERENCIAS
En otro pasaje de la entrevista habló de la diferencia entre la hipoacusia y la sordera. “La primera se presenta como una disminución de la audición, en cambio la segunda es su pérdida total. Por eso es importante tener en cuenta cuándo aparece; si la hipoacusia es prelocutiva, es decir antes de los dos años en que se da todo el desarrollo del lenguaje oral; otra es la perilocutiva, que sucede en el momento en que se está adquiriendo el lenguaje; y poslocutiva que sucede luego, alrededor de los 5 años en adelante”.
En cuanto a la localización de la lesión explicó que “una hipoacusia conductiva abarca el oído externo y medio, en tanto una hipoacusia preceptiva afecta la cóclea, el órgano de Corti y la vía auditiva. También puede ser mixta. En el caso de las hipoacusias de transmisión muchas veces son transitorias y con un buen tratamiento oportuno o quirúrgico se pueden solucionar. De acuerdo con el grado de pérdida de audición se clasifican en leves, moderadas, severas o profundas”.
La profesional indicó que “la pérdida de audición implica tener múltiples consecuencias sociales o psicológicas. Son niños que tienden a aislarse por eso es importante que los docentes observen ese signo de alarma para establecer si los pequeños se aíslan, si localizan las fuentes sonoras, si giran ante ese estímulo, si se copian mucho de los compañeros, si deambulan o son hiperactivos, o tienen mucha lectura labial para descifrar”.
De la importancia de la observación manifestó que “de acuerdo con el momento de la aparición de este problema en los niños dependerá el compromiso que va a tener. Si es detectado en el nacimiento y hasta el año puede ser equipado con sus respectivos audífonos o en el caso que necesite se le realiza un implante y el desarrollo del lenguaje se dará con normalidad. En el caso de un niño que se observa la pérdida de audición en la etapa escolar hay que realizar el tratamiento oportuno para que no pierda tiempo, no se aísle y socialmente no se vea afectado para relacionarse con sus compañeros y todo su entorno”.
ESTRATEGIAS
“Durante la conferencia se dieron a conocer elementos a tener en cuenta por los docentes, ante al caso de niños que tienen problemas para el aprendizaje o conducta porque se observarán alteraciones. Analizar cómo está en el desarrollo del lenguaje, si tienen afectaciones a nivel fonológico y articulatorio, si confunde puntos articulatorios tendrá una organización morfo-sintáctica alterada, es por eso que se deben dar consignas claras, órdenes simples y concretas, sentarlo adelante, facilitarle la lectura labial. Son diferentes tips que se pueden tener en cuenta dentro del aula”, mencionó.
“Les explicamos la importancia, al observar la alteración en el lenguaje, que la funcionalidad de la audición debe ser evaluada por diferentes técnicas. En el hospital realizamos otoemisiones acústicas a los recién nacidos, pero existen otros procedimientos como las audiometrías tonales a partir de los 5 años si el niño tiene una buena comprensión porque se necesita todo un condicionamiento para que entienda cómo es la prueba. Existe también la timpanometría, para estudiar el oído medio; y otras más complejas como los potenciales que nos dan el estado en que se encuentra la vía auditiva”, remarcó.
De esta manera se brindaron estrategias y técnicas para fomentar el desarrollo del lenguaje oral en los estudiantes, teniendo en cuenta las necesidades individuales de cada uno. La iniciativa permitió a los asistentes adquirir nuevos conocimientos y habilidades que podrán aplicar en sus prácticas docentes, mejorando así la calidad de la enseñanza y el aprendizaje de sus estudiantes.
LAS EXPONENTES
María Florencia Velázquez cursó sus estudios en la Universidad Nacional de Rosario. Facultad de Ciencias Médicas, carrera Licenciatura en Fonoaudiología. MP N°288. Diplomada en Trastornos del Lenguaje Infantil.
María Carolina Bidegorry cursó sus estudios en la Universidad Nacional de Rosario (MP.396), en la Licenciatura en Fonoaudiología.