La tercera edición de TodoLáctea comenzó, en el predio de la Sociedad Rural de San Francisco, con una nutrida presencia de funcionarios, entre los que se destacaron los titulares de los ministerios productivos de Santa Fe y Córdoba, Gustavo Puccini y Sergio Busso. Con el denominador común de la defensa de la producción, ambos condenaron el extractivismo de los derechos de exportación (mal llamadas retenciones) y resaltaron la importancia de fortalecer el federalismo para provecho de la región.
Acompañado del Secretario de Agricultura, Ignacio Mántaras, y del Director de Lechería, Carlos De Lorenzi, el Ministro de Desarrollo Productivo santafesino celebró que junto a su par cordobés contribuyeron al retroceso del impuesto a la exportación, previsto en la primera versión de la Ley Bases. “Lo hemos logrado”, dijo Puccini, al igual que la prórroga de “retenciones cero” para la lechería. “Fue un gran camino y se debe consolidar y generar una regla clara para adelante, que nos de certezas”.
En el mismo sentido, el santafesino refrendó lo que escuchó decir a muchos de los presentes: que la Región Centro “es el corazón productivo de la República Argentina”. Y por ello reclamó “mirar más el interior, porque tiene esta producción que va a sacar al país adelante”.
En la misma línea, remarcó que Santa Fe aporta los puertos para potenciar la producción regional. “En eso estamos trabajando mucho, en la logística para mejorar nuestra competitividad”, dijo, y remarcó la importancia de la terminal capitalina. “Un puerto más productivo que queremos potenciar”, anunció.
Sobre la lechería en particular, Puccini consideró que será uno de los sectores que aportarán al saneamiento de la economía nacional. “En una coyuntura que sabemos que es difícil, pero se va a salir adelante”. Y, sobre TodoLáctea, añadió: “espero que esta feria le demuestre al país que la Región Centro va a ser una locomotora que le marque el rumbo a la República Argentina para salir adelante”.

Más federalismo
Por su parte, Sergio Busso también trazó un hermanamiento con Santa Fe. “Somos prácticamente lo mismo”, dijo, por una cuestión histórica “de raíces profundas” con grandes coincidencias, sobre todo culturales.
Tal como su par santafesino, el cordobés se asumió “optimista” sobre la coyuntura nacional. Pero aclaró: “sin una macro que ordene, es muy difícil pensar en un modelo productivo”. Fundamentó en este argumento el acompañamiento de la Region Centro al gobierno nacional: “porque un gobierno que la gente elige tiene legitimidad y lo que tenemos que hacer nosotros es darle las herramientas para tratar de que pueda cumplir su cometido”.
De todas formas aclaró que esas herramientas tienen que favorecer la producción y el trabajo. “Peleamos en defensa propia y no contra alguien”, dijo en referencia al cuestionamiento a las retenciones. “Nos duele que no se entienda que a la producción hay que incentivarla y estimularla, no penalizarla o castigarla”.
En esa línea, las consideró “este maldito impuesto” que es una exacción a las provincias. Y sobre el freno al 15% para todos los bienes exportables que contemplaba la primera versión de la Ley Bases, reflexionó: “por suerte pudimos hacer entender que no era viable, sobre todo en las economías regionales y más en la lechería”. Queda pendiente, dijo, que se la declare economía regional.
Busso también reeditó las críticas al “centralismo”, que fuera lema de campaña presidencial del ex gobernador cordobés Juan Schiaretti. “Esto (la oposición a las retenciones) no es contra nadie; lo decimos hace 20 años y no es contra un gobierno, sino contra una política pública centralista, unitaria, que deja de lado el interés productivo de nuestro país”.
Para hacer docencia sobre la fuga de recursos que implica este impuesto (no coparticipable) para las provincias, Busso comparó el aporte por hectárea que hace un agricultor a cada jurisdicción. “Cuando uno analiza lo que aporta un productor por impuesto inmobiliario rural, tanto en Santa Fe como en Córdoba, este año van a pagar promedio 30/35 kilos de soja por hectárea, mientras que por retenciones van a pagar 1500/1600 kilos por hectárea”. Para que se entienda mejor, lo tradujo a pesos: a la provincia irán $ 12/14.000 pesos por hectárea y unos $ 350.000 al Estado Nacional. O sea que “un productor de 100 hectáreas en esta zona le va a pagar a la Nación 40 millones por año”. Y cerró: “si esa plata estuviera en el bolsillo del productor no tendríamos que estar mendigando” recursos ante Nación. “Hay que pelear eso, hay que tratar de hacer un país totalmente federal y esos recursos tienen que volver”, concluyó.