En la noche del miércoles 29 de mayo, dos jóvenes en moto balearon una estación de servicios de la zona sudoeste de Rosario y dejaron una nota con un mensaje intimidante dirigido al futbolista Ángel Di María.
Para los fiscales del caso, el hecho tuvo como finalidad “infundir temor y conmoción pública en los habitantes de la ciudad de Rosario, que se evidencia en las características del ataque armado realizado, a sabiendas de que generarían un mayor impacto social”.
Uno de los atacantes fue detenido varios días después y este jueves 6 de junio fue imputado por varios delitos y quedará en prisión preventiva por el plazo de ley (al menos dos años).
Dos jóvenes en moto balearon una estación de servicios de la zona sudoeste de Rosario y dejaron una nota con un mensaje intimidante dirigido al futbolista Ángel Di María.Foto: Marcelo Manera
Durante una audiencia realizada en el Centro de Justicia Penal de Rosario, los fiscales Franco Carbone y Federico Rébola imputaron a Marcos Natanael S., de 22 años, de los delitos de intimidación pública agravada por el uso de arma de fuego, portación ilegítima de arma de fuego de guerra y daño agravado por el uso de arma de fuego, todos ellos en calidad de coautor y en concurso real entre sí; y además de robo agravado por escalamiento.
Los fiscales le atribuyeron a Marcos haber ejecutado, alrededor de las 21.45 del miércoles 29 de mayo, el ataque armado contra la estación de servicios Puma, ubicada en bulevar Oroño al 5000, en la zona sudoeste de Rosario, junto a una persona de sexo masculino aún no identificada que ejercía el rol de conductor.
Marcos Natanael S. se dirigió a la playa de carga de combustible en una moto marca Keller 110 cc color roja, que él mismo había sustraído tres días antes. Primero arrojó una nota intimidatoria dirigida al jugador de fútbol Ángel Di María, y luego con una pistola calibre 9 milímetros, efectuó al menos cuatro detonaciones hacia el frente vidriado del local comercial.
La caída de Marcos
El joven fue detenido por personal de la Brigada de Captura de la Policía de Investigaciones en la mañana del viernes 31 de mayo en inmediaciones de avenida Pellegrini y colectora de Circunvalación, a pocos metros de la escuela N 1.396 Santa Lucía, cuando Marcos Natanael S. intentaba eludir a personal policial que lo estaba buscando por esa zona desde la madrugada.
Según indicó en su momento el fiscal Carbone, contaban con “una huella (dactilar) en la moto que se usó, que fue abandonada a las pocas cuadras”, en referencia a una motocicleta marca Keller de color roja, de 110 centímetros cúbicos, que fue encontrada horas después del ataque en cercanías de Flammarión (calle paralela a las vías del ferrocarril) y avenida Uriburu, a muy pocas cuadras de la estación de servicio.
La moto tenía pedido de captura por robo. Había sido sustraída el domingo 26 de mayo del garaje de una vivienda que está en calle Uriarte 7800, de barrio Godoy. Según se indicó en el marco de la audiencia imputativa, la moto y una bicicleta playera rodado 26 fueron robadas por Marcos.
Infundir temor y conmoción pública
Para los fiscales, el ataque tuvo como objetivo infundir temor y conmoción pública por los medios materiales empleados para la concreción del ilícito; la elección de un establecimiento ubicado en una de las arterias principales de la ciudad, en un horario sumamente concurrido; la nota en la que se mencionaba “al jugador de fútbol de trascendencia mundial Ángel Di María y su posible retorno deportivo a la ciudad” y el uso de la firma ‘Los Rosarinos’, que fuera utilizada en “numerosos atentados armados contra instituciones públicas, ataques incendiarios a vehículos de personas inocentes, notas mensajes y banderas con amenazas a las máximas autoridades de los poderes ejecutivos provincial y nacional dejadas en lugares públicos”.
Las medidas investigativas para lograr la imputación por parte de la fiscalía incluyó el relevamiento de cámaras, entrevistas a testigos, e informes de rastros y de balística, que dieron como resultado la individualización de Marcos Natanael S.
El juez de primera instancia Hernán Postma tuvo por formalizada la audiencia y admitió el pedido de prisión preventiva efectiva por el plazo de ley solicitado por la Fiscalía. Mientras, continúa la búsqueda del otro autor de la balacera, que iba al volante de la moto.
El ataque a tiros se produjo alrededor de las 22 del miércoles 29 de mayo en la estación de servicios ubicada en bulevar Oroño y Lamadrid. Además de las balas que impactaron en uno de los vidrios del salón de ventas, los dos atacantes que se desplazaban en una moto de color roja dejaron una nota que decía: «Te estamos esperando Di María Los rosarinos».