El gobierno de la provincia de Santa Fe define por estas horas cuándo convoca al sector docente para reencauzar la discusión paritaria. Lo hará debiendo sortear dos inconvenientes: por un lado, el diagnóstico confirmado de dengue del ministro de Educación, José Goity, que le impedirá participar de la discusión; por el otro, un paro sorpresivo que resolvió la CTERA a nivel nacional y al que adhirió AMSAFE.
La medida de fuerza de este jueves volverá a implicar el cierre de las escuelas públicas y se convertirá en un nuevo obstáculo para facilitar el diálogo, en una semana con sólo tres días hábiles. Como se sabe, la actual gestión – así como todas las anteriores- no discute en paritarias, mientras se realicen medidas de fuerza.
Según pudo confirmar Mirador, la intención del gobierno sería convocar el viernes, con funcionarios de Educación que sustituyan al ministro. Pero la decisión se terminaría de adoptar tras una serie de conversaciones internas que mantendrán miembros del Poder Ejecutivo en las próximas horas.
Propuesta
Este martes en la ciudad de Reconquista, el gobernador ratificaba la voluntad de diálogo y la decisión de volver a convocar a los docentes. En las mismas declaraciones, Maximiliano Pullaro adelantaba que se le trasladarían a los referentes sindicales del sector, la misma oferta que recibieron – y aceptaron- la semana pasada los sindicatos de la administración central, ATE y UPCN. Aquella mejora consistía en un 20% de aumento para las categorías iniciales – 1, 2 y 3- y del 17% para las superiores. Ello, sobre la base del salario de diciembre, aunque sin tener en cuenta el aumento del 36,4%, correspondiente a la paritaria 2023, por activación de la cláusula gatillo. El acuerdo con la administración central resignó, además, el pago de una diferencia sobre enero (22,4%) y febrero (16%), derivada también de la discusión salarial del año pasado.
En función de ello, será clave conocer la devolución de la dirigencia sindical docente a tal propuesta, y si acepta ceder el pago de dichas diferencias que fueron reclamadas vehemente por el sector. Por el lado del gobierno, y con la misma hipótesis, será central saber si la propuesta incluye algún tipo de matiz que permita compensar el plus salarial perdido por los maestros a partir de la eliminación del Fondo Nacional de Incentivo Docente. El éxito de la negociación dependería, en buena medida, de los contactos informales que pudieran mantenerse antes de los encuentros formales.