En la actual temporada, Rosario ha registrado 43 casos de dengue, de los cuales 39 son autóctonos y 4 importados. Esta cifra representa una disminución del 97 % en comparación con la temporada anterior, según la información a la que pudo acceder Mirador Provincial. A pesar de esta notable reducción, las autoridades sanitarias locales mantienen una postura de extrema cautela.
Analía Chumpitaz, referente del programa Objetivo Dengue, señaló que, aunque la situación es alentadora, "estamos en una fase de alerta temprana". Esto implica que, a pesar de la disminución de casos, es fundamental no bajar la guardia y continuar con las medidas preventivas.
La reducción en la cantidad de casos se atribuye a las intensas campañas de prevención y concientización llevadas a cabo en la ciudad. Estas incluyeron fumigaciones, descacharrados y educación a la población sobre la importancia de eliminar posibles criaderos del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue.
Sin embargo, Chumpitaz enfatizó que el descenso de casos no debe llevar a una falsa sensación de seguridad. "El mosquito sigue presente en nuestra región, y las condiciones climáticas pueden favorecer su reproducción", advirtió.
Por ello, es esencial que la comunidad continúe colaborando en las acciones preventivas.
La colaboración entre la comunidad y las autoridades es fundamental para mantener bajo control la situación. Cada vecino tiene un rol importante en la prevención del dengue.Foto: Archivo Mirador.
Las autoridades sanitarias recomiendan a la población mantener patios y jardines limpios, eliminar recipientes que puedan acumular agua y utilizar repelentes. Además, ante síntomas como fiebre alta, dolor de cabeza, dolores musculares y articulares, se insta a consultar de inmediato al médico y evitar la automedicación.
La vigilancia epidemiológica continúa siendo una herramienta clave. Los equipos de salud están atentos a la aparición de nuevos casos y realizan un seguimiento detallado para prevenir posibles brotes. "La detección temprana nos permite actuar rápidamente y evitar la propagación del virus", explicó Chumpitaz.
Es importante destacar que el dengue es una enfermedad endémica en muchas regiones de Argentina, y Rosario no es la excepción. Por ello, las estrategias de prevención y control deben ser sostenidas en el tiempo, especialmente durante los meses de mayor actividad del mosquito.
La colaboración entre la comunidad y las autoridades es fundamental para mantener bajo control la situación. "Cada vecino tiene un rol importante en la prevención del dengue. La suma de pequeñas acciones puede marcar una gran diferencia", afirmó Chumpitaz.
A medida que avanza la temporada, se espera que las condiciones climáticas varíen, lo que podría influir en la dinámica de reproducción del mosquito. Por ello, es crucial adaptar las estrategias de prevención y mantener una comunicación constante con la población.
En resumen, aunque Rosario muestra una disminución significativa en los casos de dengue, la cautela y la prevención siguen siendo esenciales. La continuidad de las medidas preventivas y la colaboración comunitaria serán determinantes para evitar futuros brotes y proteger la salud de todos los rosarinos.