Joaquina tiene 17 años y es oriunda de Cañada de Gómez, localidad cabecera del departamento Iriondo. La travesía podría concretarse entre los días 27 de febrero y 4 de marzo. Solo 50 personas en el mundo hicieron esta travesía en soledad, que se extiende por más de 40 kilómetros.
La nadadora se enfrentará a un desafío de entre 40 y 44 kilómetros, nadando desde Punta Lara hasta Colonia de Sacramento. La distancia exacta dependerá de las condiciones variables del río, como las corrientes y los vientos. Las reglas de la competencia son rigurosas: solo se permiten pausas de 90 segundos cada 30 minutos para hidratarse, y está estrictamente prohibido tocar cualquier embarcación o persona durante la travesía.
"Gracias a Nadando Argentina, tengo la oportunidad cumplir este sueño. Consta de unir las costas de Colonia-Uruguay y Punta Lara-Buenos Aires. Desde los 11 años esperando el momento que se dé. Miles de metros entrenados, para ir en busca de este sueño, que por fin, tiene una fecha: primeros días de marzo. En momentos como este, de tanto sacrificio, voy a necesitar de todo el apoyo y buenas energías de todos los cañadenses que siempre me acompañan”, expresó la joven.
Sobre la competencia
El cruce del Río de la Plata está catalogado como uno de los desafíos más importantes y complicados a nivel mundial. Apenas 50 personas lograron atravesar los más de 40 kilómetros nadando en solitario. Si el clima lo permite, Dalmazzo intentará en algo más de un mes sumarse a ese selecto grupo. Para este cruce no tiene que llover, debe estar descartado la presencia de una sudestada o calor extremo, por otro lado, se debe asegurar más de 12 horas de luz natural, por eso se realiza en verano, donde la temperatura del agua promediará los 24 grados.
Al momento de arrojarse al agua, la joven será acompañada por tres embarcaciones: una de hidratación con guardavidas incluido, otra con su entrenador y el sistema logístico y la última de Prefectura Naval Argentina, por resguardo ante cualquier complicación. Ninguna de estas puede estar a menos de un metro y medio de la adolescente para lograr la validez de la prueba, como también tener un equipamiento en regla: una malla común, gorro y dos tipos de antiparras.