Para jugar lindo hay que tener una buena cancha. Y bajo ese concepto, la Subcomisión de Fútbol de Atlético Sastre, junto al apoyo de la Comisión Central del club albiceleste, se metió en un ambicioso proyecto para el cuidado y mantenimiento del campo de juego del estadio Académico.
Con una inversión que ronda los 20 millones de pesos implementará un sistema de riego por aspersión con tecnología de punta que le permitirá regular sectorialmente la cantidad de agua a derramar.
Además, cuenta con sensores para determinar, ante alguna lluvia previa, la anulación del mismo. Los trabajos ya comenzaron y estarán listos antes del inicio de la temporada 2025. "Es un sueño hecho realidad. Se está terminando una de las obras más importantes que tuvo la cancha principal en su historia, junto a la iluminación y los nuevos vestuarios", dijo a este medio Germán Martolio, uno de los integrantes del grupo que comanda el fútbol de la AKD.
Sin dudas que es una de las obras de impacto en el fútbol del departamento San Martín en este inicio de año. Con tareas previas en el cuidado del césped para llegar con la mejor versión a la temporada liguista, ahora la Academia fue por mucho más. Después de un arduo asesoramiento con profesionales, desde la Subcomisión de Fútbol apostaron por pisar el acelerador e implementar un innovador sistema de riego por aspersión diseñado por ingenieros que llevan sus trabajos a la mayoría de canchas profesionales del país y América. "Hacía mucho tiempo que no se hacía algo tan importante en la cancha. Va a durar, creemos, unos 20 años. Todo dejará de ser manual y se podrá programar de acuerdo con las necesidades. Es un trabajo de lo más importante de la historia en el campo de fútbol", indicó Martolio.
Detalles
El equipamiento a instalar consta de 24 aspersores enterrados, ascendentes, distribuidos por el campo de juego y divididos en 6 zonas. Cuenta, además, con un programador automático conectado a wi-fi que permite manejarlo a través de algún dispositivo móvil, programando así un determinado caudal de agua por estaciones del año, días u horarios.
A su vez, el sistema posee una serie de sensores de lluvia que anula el riego en caso que el milimetraje registrado sea suficiente para el campo de juego. También permite elegir, dependiendo del tránsito de juego y el estado de la cancha, en qué sector se requiere arrojar un mayor caudal de agua.
En tanto, y considerando el alto contenido de sales que posee el agua en el centro oeste santafesino, la misma no se extraerá directamente del pozo para pasar al riego, sino que se realizarán dos perforaciones y se instalarán bombas de poco caudal para no salinizar los agujeros que, luego, llenarán los reservorios de 25.000 litros cada uno.
Finalizado el proceso, una bomba de alta presión se encargará de llevar hacia el riego y sus 24 aspersores el agua, pudiendo así administrar fertilizantes y nutrientes en los tanques para derramar de forma directa sobre el césped. "Es una obra que está a cargo de Matías Reccia, que se necesitaba hacer y tomamos la decisión de encarar. Estimamos que en pocos días más va a estar todo finalizado. Realmente es un sueño hecho realidad", sostuvo uno de los integrantes de la Subcomisión.
Además, y por medio de la empresa Emfag, se iniciaron tareas sobre el campo de juego para llegar al comienzo de la pretemporada –fijada para el lunes 3 de febrero– con un piso en óptimas condiciones. "Estamos arrojándole líquidos especiales y nivelando con arena la cancha. No sólo eso, sino también resembrando con semillas especiales el campo principal y auxiliar, donde se realizan los entrenamientos de todas las categorías del club", completaron.
Sobre el cierre, Martolio destacó los trabajos del equipo para encarar una obra de impacto que beneficiará muchas generaciones de deportistas. "Todo esto es gestión de la nueva Subcomisión que se hizo cargo a partir de ahora del Fútbol Infantil y Mayor del club con un gran apoyo de la Comisión Directiva de la institución".