José Prinsich [email protected] “Puedes cambiar el mundo tan sólo en un instante” cantaba Alejandro Lerner y vaya si estaba en lo cierto. No hacen faltan monumentales acciones para comenzar con el cambio. Las acciones más pequeñas, aunque parezcan las más insignificantes, marcan la diferencia y a la larga son determinantes. En General Ramírez entendieron que la concientización ambiental empieza desde casa y así lo están haciendo.
Frente a los nuevos desafíos que se nos presentan como comunidad, en un contexto de crisis socio ambiental global y el constante cambio climático, la Municipalidad se propuso seguir trabajando la educación ambiental para promover cambios culturales que aseguren la sustentabilidad de la localidad.
A través de la implementación de diferentes estrategias y en continua articulación con las escuelas, se fomenta la incorporación de hábitos responsables para hacer del mundo un lugar mejor. En este sentido trabajan no sólo en la separación de residuos en origen sino también en la inclusión y el reconocimiento de actores claves como son los recuperadores. El cuidado del arbolado urbano, la plantación de nuevas especies, la erradicación de los microbasurales, la descacharrización para evitar enfermedades como el dengue y el lavado de manos también aparecen como propuestas alternativas.
Manos a la obra
Con el objetivo de presentar el cronograma de actividades para este año, la Secretaría de Relaciones con la Comunidad convocó a los colegios primarios de la ciudad para hacerlos partícipes de las propuestas, escuchar opiniones y compartir una distendida charla en pos de mejor la calidad de vida de los ramirenses.
La presentación se realizó en el Concejo Deliberante y estuvieron presentes docentes y directivos de la Escuela Integral N°5 “Alborada”, Escuela N°13 “Blanco Encalada”, Escuela N°31 “Leopoldo Herrera”, Escuela N°57 “Linares Cardozo”, Escuela N°146 “Jesús de Nazareth” y Escuela N°153 “Madre de Jesús”.
“La idea era contarles toda la agenda ambiental que tenemos, haciendo hincapié en el programa Sustentar y focalizándonos en todo lo que va a ser la parte de educación ambiental. Aprovechamos la oportunidad para mostrarle a las instituciones educativas los productos de madera plástica que trajimos de Bernal (Buenos Aires). Estos productos (banco canadiense, subibaja y huerteras) llegaron gracias al trabajo de todos los vecinos que se sumaron a esta campaña de botellas de amor, que la verdad viene siendo un éxito”, dejó en claro Carlos Troncoso, a cargo de la mencionada cartera municipal. El funcionario destacó que “el programa arrancó en septiembre del 2020. Este año se cumplen dos años. Es un programa que viene funcionando muy bien en la sociedad”.
Cabe destacar que, en el marco del Día Mundial de la Tierra (22 de abril), desde el municipio se entregaron huerteras de madera plástica y plantines para los jardines de infantes de la Ramírez.
A participar
Innumerables son los beneficios de las denominadas “Botellas de Amor”, pero básicamente el objetivo radica en el cuidado del medio ambiente. Con estas botellas se produce madera plástica, la cual se puede utilizar para la construcción de bancos, mesas, composteras, juegos infantiles y cestos, entre otros productos.
En este sentido, los estudiantes no sólo serán parte del circuito productivo, sino que también serán actores indispensables para la concientización en la comunidad, especialmente para tomar una dimensión verdadera de lo que consumimos a diario. Lo que los alumnos generen volverá al colegio en forma de mobiliario.
De esta manera se evitará que el material que contiene la botella llegue a la planta de reciclado, ya que el mismo no tiene valor comercial para la cooperativa de reciclado de General Ramírez “Creando Valores”.
Atendiendo estas premisas, se lanzó un concurso para recolectar estas botellas. El premio será un banco canadiense de madera plástico para el curso que junte la mayor cantidad de kilos. La convocatoria está destinada para los alumnos de sexto grado de los establecimientos públicos y privados. La fecha límite para presentar las botellas será el 30 de agosto. Ese día, en las instalaciones de la Casa de la Cultura, se pesarán los envases y se conocerá el colegio ganador.
Los destinatarios podrán llenar envases de cualquier tamaño, con plásticos de un solo uso: bolsas, paquetes de fideos, galletitas, arroz, polenta, envoltorios de golosinas. Con ayuda de una cuchara o varilla deberán hacer presión para que quede bien compactada.
A su vez quedará descalificado el grupo que presente botellas con materiales que no correspondan como por ejemplo papel, cartón, globos, piedras, metal, arena, vinilos, telgopor, guantes de látex, radiografías, esponjas, aluminio, tierra, tetra pack y telas.
Fundación Eco Urbano
En la jornada de presentación también estuvieron presentes integrantes de la Fundación Eco Urbano, organismo que desde varios años viene trabajando fuertemente en la Capital Provincial de la Juventud con diversas campañas.
“Con el municipio venimos trabajando desde hace varios años, promoviendo la participación de la comunidad que es fundamental para que estos tipos de programas funcionen. Una vez más nos reunimos con las escuelas de la localidad para fortalecer la línea que se viene desarrollando en educación ambiental. Queremos promover dentro de las escuelas los cambios de hábitos y de valores necesarios para los desafíos que tenemos como sociedad global, en relación al cambio climático y todas las problemáticas socioambientales, que juntos tenemos que atravesar. Con creatividad tenemos que tratar de generar decisiones”, reconoció Vanesa Zehnder de la Fundación.
Sobre el trabajo que vienen realizando, Zehnder agregó que “queremos que las escuelas participen de estas políticas públicas, que puedan visitar la planta de clasificación donde trabaja la cooperativa “Creando Valores”. El trabajo que ellos hacen repercute y beneficia a toda la comunidad. Hay mucho por hacer y afortunadamente las escuelas lo saben. Ellas están en sintonía con lo que el municipio está promoviendo a través de la Secretaría de Relaciones con la Comunidad. La educación ambiental es un camino que hay que fortalecer porque es un trabajo a corto, mediano y largo plazo. Hay muchos municipios en la provincia que están avanzado como Cerrito con el biogás. Hay otros que están recién arrancando. Esto es día a día porque los residuos llegan todos los días”
A su vez enfatizó que “con la pandemia tuvimos que cambiar la metodología, pero trabajamos igual y las escuelas nos abrieron las puertas. Vamos a seguir con una modalidad mixta. Nosotros les proveemos de contenido y material a los docentes de manera virtual pero también vamos a hacer talleres presenciales, que es lo que a los chicos les gusta. Vamos a hacer actividades fuera de las aulas porque la educación ambiental no solamente se limita al trabajo áulico. Por ejemplo, la plantación de árboles que el municipio viene proponiendo muy fuertemente y con una articulación que se va a realización con la Facultad de Agronomía. Este año vamos a tener un asesoramiento que nos parece muy importante. Esto tiene que ver con la mitigación y la adaptación al cambio climático. El arbolado urbano es una herramienta muy importante”.
